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La farmacéutica Faes Farma ha anunciado que su beneficio aumentó un 10% en el primer semestre de 2024, cerrando junio con unas ganancias de 58,3 millones de euros.
Según ha notificado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los ingresos en los primeros seis meses del año aumentaron un 8,2% desde los 253 millones del mismo período comparable anterior hasta los 273,66 millones alcanzados en este semestre. De igual modo, el margen bruto aumentó un 8,8% hasta los 190,53 millones, impulsado por el mix de ventas y por las mejores de costes de producto. El EBITDA de la compañía repuntó un 10% en el período, cerrando junio en 78,5 millones de euros.
Por geografías, las ventas de Faes Farma en España representaron menos de la mitad de los ingresos: 115,7 millones, un aumento del 5% en comparación con el primer semestre de 2023. Por el contrario, las ventas internacionales aumentaron un 11%, hasta los 157,9 millones de euros.
El negocio farmacéutico de la compañía aumentó un 9%, hasta los 247,6 millones de euros, de los cuales un 42%, 111,7 millones (+7%), fueron aportados por las tres principales moléculas de la compañía: Bilastina (74,2 millones, +5%), Calcifediol (29,7 millones, +12%) y Mesalazina (7,8 millones, +9%).
Faes destaca que la bilastina tuvo un crecimiento "ligero" en el mercado español (+1%), a pesar de los ajustes de precio, aunque el desempeño fue más "positivo" en el mercado internacional (+6%). Asimismo, las ventas de Calcifediol se aceleraron debido al impulso recibido en todos los países de América Latina, especialmente en México y Ecuador, mientras que las ventas internacionales de Mesalazina compensaron el "ligero" decrecimiento en el mercado nacional.
El resto del negocio farmacéutico creció un 11%, hasta los 135,9 millones, mientras que la rama de nutrición y salud animal se contrajo un 2% y cerró junio con unas ventas de 26 millones de euros, 400.000 euros menos que hace un año. Sobre este último, Faes señala que "se va ralentizando el decrecimiento en las ventas que, aunque siguen influidas por la falta de lechones debido a las enfermedades emergentes, van recuperándose".
De cara al futuro, la compañía mantiene las previsiones para el ejercicio fiscal de 2024 en el que, si bien identifican "algunos retos relevantes" en el horizonte, estiman que seguirán creciendo "apalancándonos en nuestro negocio internacional". En concreto, la compañía prevé un crecimiento de los ingresos de entre el 6% y el 8%, así como una expansión del EBITDA de entre el 3% y el 5%. Entre los impactos negativos que observa la empresa destaca la devaluación del yen, que podría impactar en el negocio de licencias de Bilastina, así como el fin de la exclusividad de esta molécula en Canadá en el próximo mes de octubre.