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El fabricante de aviones Boeing ha publicado los resultados del primer semestre de 2022, un período que ha cerrado con pérdidas de 1.082 millones de dólares frente a las ganancias de 6 millones de dólares registradas entre enero y junio de 2021. En el trimestre, el beneficio se recorta un 72% desde los 567 millones a los 160 millones de dólares del segundo trimestre del actual ejercicio.
Las pérdidas por acción en el semestre son de 1,73 dólares frente a las ganancias de 9 centavos por derecho del mismo período de 2021. En el trimestre, en cambio, el beneficio por acción es positivo… pero un 68% menor que hace un año, pasando de 1 dólar por acción a 32 centavos por acción. El resultado ha caído por debajo de las expectativas del consenso, sin embargo, está provocando un repunte en el valor de la compañía, que sube por encima del 3% en el ‘premarket’.
Los ingresos, que también han decepcionado al mercado, tampoco crecen en el semestre ni en el trimestre En la primera mitad del año, las ventas se han reducido un 5% desde los 32.215 millones ingresados entre enero y junio de 2021 a los 30.672 millones este año; en los últimos tres meses, los ingresos han caído un 2% hasta 16.681 millones de dólares desde los 16.998 del mismo período de hace un año.
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Los ingresos procedentes del segmento de aviones comerciales aumentaron hasta los 6.200 millones de dólares “impulsados por el aumento de las entregas del 737, parcialmente compensado por el descenso de entregas del 787”. “El margen de explotación del -3,9% también refleja los costes anormales y los gastos del período, incluyendo mayores costes de I+D”, explican.
Boeing destaca que hay un total de 372.000 millones de dólares de cartera de pedidos, incluyendo más de 4.200 aviones comerciales. De estos últimos, señala que 168 son modelos 737 MAX y otros 13, cargueros, entre los que se incluyen siete 777-8 Freighters de Lufthansa. Asimismo, señalan que se entregaron 121 aviones durante el trimestre.
En cuanto al programa 787, la compañía sigue trabajando con la FAA para finalizar las acciones para reanudar las entregas. “El programa está produciendo a un ritmo muy bajo y seguirá haciéndolo hasta que se reanuden las entregas, con una previsión de volver gradualmente a cinco al mes a lo largo del tiempo”, señalan. La empresa sigue previendo unos costes anormales del 787 de aproximadamente 2.000 millones de dólares, la mayoría de los cuales se producirán a finales de 2023, incluidos 283 millones de dólares registrados en el trimestre.
El margen operativo tampoco ha sido positivo. En el semestre, se sitúa en terreno negativo, en el -1,3%, respecto al 2,9% de hace un año. En el trimestre, ha caído un 23% desde el 6% hasta el 4,6% a cierre de junio de 2022.
Donde si hay una clara mejoría es en el flujo de caja operativo. Así, repunta en más de 700 millones en tasa intersemestral, pasando de -3.870 millones a -3.135, y regresa a terreno positivo en el trimestre, situándose en el nivel de los 81 millones de dólares desde los -483 millones de hace un año. Asimismo, la compañía señala que espera que el flujo de caja libre se mantenga en terreno positivo a cierre del ejercicio 2022.
"En el segundo trimestre hemos realizado importantes avances en los programas clave y estamos dando un impulso a nuestro cambio de rumbo", ha indicado Dave Calhoun, presidente y consejero delegado de Boeing. "A medida que empezamos a alcanzar hitos clave, hemos sido capaces de generar un flujo de caja operativo positivo este trimestre y seguimos en camino de lograr un flujo de caja libre positivo para 2022", señala Calhoun. El ejecutivo también ha destacado que "aunque estamos haciendo progresos significativos, tenemos más trabajo por delante y seguiremos centrados en la seguridad, la calidad y la transparencia, mientras impulsamos la estabilidad, mejoramos el rendimiento y seguimos invirtiendo en nuestro futuro".
