La petrolera Shell ha comunicado este jueves una caída del 56% en las ganancias ajustadas del segundo trimestre, hasta 5.073 millones dólares desde 11.472 millones, debido a que los precios del petróleo y gas y los márgenes de ganancias de refino cayeron, lo que lleva al gigante de la energía a desacelerar su programa de recompra de acciones.
Shell ha dicho que recomprará 3.000 millones de dólares en acciones durante los próximos tres meses, frente a los 3.600 millones de dólares de los tres anteriores, al tiempo que aumentará su dividendo trimestral un 15%, a 0,33 dólares por acción, como se anunció previamente en junio.
"Ya teníamos un indicio de que las ganancias de Shell en el segundo trimestre podrían quedarse cortas cuando la compañía informó de que su división de productos químicos tendría pérdidas a principios de este mes, y así lo ha demostrado con los resultados de hoy, que muestran una fuerte caída en las ganancias", escribe este jueves Michael Hewson, director de análisis de CMC Markets en Londres.
"Ayer, el impacto de las fuertes caídas en los precios del petróleo y el gas quedó al descubierto cuando el gigante petrolero noruego Equinor reveló una disminución del 57% en las ganancias del segundo trimestre, y con los resultados de BP la próxima semana, es probable que este sea un tema familiar", añade Hewson. En este sentido, cabe destacar que Repsol ha comunicado hoy una caída del beneficio hasta septiembre del 44%.
Los resultados del segundo trimestre de Shell vieron caer las ganancias ajustadas a 5.073 millones, como se apunta más arriba, por debajo de las expectativas de 5.610 millones, y muy por debajo de los 9.600 millones en el primer trimestre. La compañía culpó a los precios, volúmenes y márgenes más bajos, junto con un comercio más débil por la desaceleración económica.
Como era de esperar, su división de productos químicos tuvo un trimestre difícil, cayendo a una pérdida de 468 millones, aunque esto fue compensado por una ganancia de 917 millones en el lado de los productos. Las ganancias en su división integrada de gas cayeron a 2.500 millones, una disminución del 34% con respecto al mismo trimestre del año pasado y un descenso de casi el 50% con respecto al primer trimestre.
En Upstream, la disminución de las ganancias fue aún más marcada, con una caída del 66% en las ganancias ajustadas, a 1.680 millones de dólares, desde el mismo trimestre del año pasado, y una disminución del 40% desde el primer trimestre.
Las ganancias en energías renovables también cayeron a 228 millones, una disminución del 69% con respecto al mismo período del año pasado y una caída del 41% con respecto al primer trimestre. "La disminución de la rentabilidad aquí sirve para resaltar los problemas que enfrentan las grandes compañías petroleras con respecto a la transición energética y el papel que cumple el negocio heredado en la financiación de esta importante área", explica Michael Hewson.
En cuanto a las perspectivas, Shell rebajó sus expectativas de gasto de capital en 1.000 millones de dólares, a entre 23.000 y 26.000 millones de dólares. A principios de este mes, Shell dijo que planea invertir 10.000-15.000 millones entre 2023 y 2025 para apoyar el desarrollo de soluciones energéticas bajas en carbono.
