La socimi Árima Real State ha publicado los resultados correspondientes al ejercicio 2022, un período que se ha cerrado con una reducción de más de la mitad de su beneficio. Así, la compañía ha visto como sus ganancias han pasado de 26,12 millones de euros en 2021 a 10,47 millones en los últimos 12 meses debido a la menor revalorización de sus activos en 2022 frente al año anterior.
Según ha informado la empresa del Mercado Continuo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), cerró el ejercicio con un valor de su cartera de activos de 380 millones de euros, un 11% superior desde diciembre 2021 y un 30% sobre la inversión total realizada. Árima señala que el incremento en la valoración refleja “las mejoras acometidas en los inmuebles y los arrendamientos firmados en el periodo”.
Los ingresos brutos por alquileres recurrentes crecieron un millón, hasta los 6,2 millones de euros. A su vez, el resultado bruto de explotación (EBITDA) mejoró casi un 50%, pasando de -1 millón de euros en 2021 hasta los -552.000 euros a cierre del último ejercicio.
Por otra parte, tras haber completado sus primeros proyectos de reforma (los edificios Habana y María de Molina) Árima ha alcanzado su cifra récord de alquiler con 16.200 metros cuadrados nuevos firmados y un incremento de renta del 156% de media en los activos reformados.
“Todo ello le ha permitido cerrar el ejercicio con un incremento del 10% de ocupación con respecto al ejercicio 2021 y unos ingresos por renta anualizados de 9,6 millones de euros, un 80% superiores al periodo anterior”, han apuntado desde la socimi.
Asimismo, desde Árima han señalado que su cartera presenta todavía “un importante recorrido de crecimiento” en sus ingresos por alquiler a medio plazo, estimado en un 210%, derivados fundamentalmente de los proyectos de reforma previstos. “Así, a lo largo de 2023, Árima prevé la finalización del proyecto Cadenza, con más de 14.500 metros cuadrados de superficie bruta alquilable de oficinas de calidad y las máximas certificaciones de sostenibilidad, salud y bienestar”, han añadido.
Por otro, la socimi ha señalado el “buen” avance del plan de recompra de acciones lanzado en julio de 2022, del cual se ha ejecutado el 26% y representa el 1,8% de las acciones. La recompra contemplaba un importe máximo de 20 millones de euros o 2 millones de acciones con el fin de “devolver capital a los accionistas o de realizar pagos en especie”.
“A pesar del incierto entorno macroeconómico, la demanda de espacios de trabajo de mayor calidad sigue en alza, y Árima se encuentra bien posicionada para captar una buena parte de dicha demanda. Contamos con una cartera defensiva y con gran potencial, y uno de los balances más sólidos del sector. Actualmente estamos analizando activos por un total de 1.000 millones de euros, y creemos que 2023 podría ser un punto de inflexión en inversión para nosotros. Mientras tanto, el consejo sigue respaldando el plan de recompra vigente”, ha señalado Luis López de Herrera-Oria, consejero delegado de la firma.
