Las acciones de Asos han caído este miércoles un 8,2% después de que la compañía haya presentado unas pérdidas netas de 223,1 millones de libras en su año fiscal, en comparación con los números rojos de 30,8 millones de libras del mismo periodo del año pasado. Además, para 2024, prevé que la facturación registre un descenso de entre el 5% y el 15%.
La facturación se ha situado en 3.538 millones de libras, lo que supone un 10% menos que el ejercicio anterior. El resultado bruto de explotación ha caído un 32%, hasta los 124,5 millones de libras.
El director ejecutivo, José Antonio Ramos Calamonte, ha señalado que 2023 "fue un año de buenos avances para Asos en un entorno muy desafiante y estoy orgulloso de lo que la compañía ha logrado".
Tras estos resultados, Asos ha actualizado sus previsiones de cara al año fiscal 2024. Ahora espera que las ventas caigan entre un 5% y un 15%, pero asegura que volverá a crecer en 2025.
"Asos ha estado luchando con un verano difícil para las ventas en medio del clima húmedo, la débil demanda de los consumidores durante la crisis del coste de vida, problemas con la gestión de inventario que ha obligado a la compañía a depender de grandes descuentos para cambiar de stock y una intensa competencia de otros marcas de moda rápida", destacan los analistas de interactive investor.