Allianz registró en el primer trimestre un beneficio neto de 2.030 millones de euros, lo que supone casi cuatro veces más que en el mismo periodo del año pasado, cuando las ganancias fueron de 474 millones de euros. Sin embargo, la cifra se ha colocado por debajo de las expectativas.
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El beneficio operativo fue de 3.700 millones de euros, un 24% superior, mientras la facturación ascendió a 46.000 millones de euros a finales de marzo, con un incremento anual del 3,9%.
"Podemos estar orgullosos de nuestro beneficio operativo y beneficio neto", ha señalado el consejero delegado de Allianz, Oliver Baete, ya que "demuestran la ejecución consistente de nuestra estrategia y reflejan nuestra fortaleza y capacidades".
"Una vez más nos beneficiamos de nuestra mezcla de negocios diversificada y obtuvimos un desempeño particularmente sólido en el segmento de daños a la propiedad, impulsado por precios sólidos, disciplina de suscripción continua y enfoque en mayores ganancias de productividad", ha añadido.
La compañía ha confirmado sus objetivos anuales. Además, hace unos días, anunciaba que llevaría a cabo un nuevo programa de recompra de acciones por valor de 1.500 millones de euros. Este programa comenzará a finales de mayo y finalizará al acabar el año, como muy tarde.
