Adidas registró un beneficio neto atribuido de 612 millones de euros durante 2022, lo que supone un 71,1% menos que el año precedente. En el cuarto trimestre, tuvo unas pérdidas netas de 482 millones de euros. Además, ha anunciado que prevé recortar su dividendo. De cara al futuro, la compañía asegura que "2023 será un año de transición para construir la base para 2024 y 2025".
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La firma deportiva registró en todo el año unas ventas netas de 22.511 millones de euros, un 6% más. En todo 2022, el beneficio operativo del año fiscal disminuyó un 66%, a 669 millones de euros.
Entre octubre y diciembre, Adidas tuvo una pérdida operativa de 724 millones de euros en comparación con el beneficio operativo de 66 millones de euros del año anterior. Los ingresos sin efectos cambiarios en el cuarto trimestre disminuyeron un 1%, lo que refleja el impacto negativo de alrededor de 600 millones relacionado con la decisión de la compañía de terminar la asociación con Yeezy a finales de octubre.
Si bien los ingresos por comercio electrónico disminuyeron un 4% durante el trimestre, las ventas en las tiendas minoristas de Adidas aumentaron un 1%. Los ingresos totales de Adidas aumentaron un 1% en comparación con el año anterior, hasta los 5.205 millones de euros. El margen bruto disminuyó 9,9 puntos porcentuales, hasta el 39,1%.
Además, Adidas ha anunciado su intención de recortar el dividendo de 2022, hasta los 0,70 euros por acción. El dividendo del año anterior fue de 3,30 euros.
"2023 será un año de transición para construir la base para 2024 y 2025. Necesitamos reducir los inventarios y bajar los descuentos. Luego, podemos comenzar a construir un negocio rentable nuevamente en 2024. Adidas tiene todos los ingredientes para tener éxito. Pero debemos volver a centrarnos en nuestro núcleo: producto, consumidores, socios minoristas y atletas", ha señalado Bjørn Gulden, CEO de Adidas.
"Las cancelaciones de inventario y los costos únicos relacionados con la terminación de su asociación con Yeezy en octubre le han costado mucho a Adidas", apuntan en interactive investor, añadiendo que "además, ha estado lidiando con el aumento de los costos de la cadena de suministro después de la pandemia y el contexto macroeconómico que ha debilitado al consumidor y ha provocado fuertes descuentos para atraer clientes".
"Adidas ha estado lidiando con el aumento de los costes de la cadena de suministro después de la pandemia y el contexto macroeconómico que ha debilitado al consumidor y ha provocado fuertes descuentos para atraer clientes", dicen los analistas.
En opinión de los expertos de Bankinter, "el grupo seguirá teniendo que lidiar con el legado de la pérdida de cuota en China tras los boicots en 2021, la salida de Rusia y la creciente competencia de otras marcas a nivel global". Calculan que la compañía no volverá a tener margen operativo positivo hasta 2024. A esto se suma que, desde la venta de Reebok en agosto 2021, la compañía no ha conseguido cumplir los objetivos de su plan estratégico.
