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El grupo ACS se ha anotado un beneficio neto atribuible de 545 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que supone un incremento del 24,7% respecto al mismo periodo de 2020, tal y como han informado en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
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Todo ello gracias al buen comportamiento operativo, destacando la recuperación del tráfico en las autopistas de Abertis tras las fuertes caídas de 2020 por la pandemia. De hecho, el impacto de la filial ha supuesto 96 millones de euros en las ganancias del grupo gracias a que se ha incrementado un 21,6% la circulación de automóviles, mostrando tendencias positivas iguales o superiores a las de 2019, según indican desde ACS.
La construcción ha crecido un 2% hasta los 209 millones de euros, con unas ventas de casi 19.000 millones de euros, un 3,7% inferiores a las del año anterior. Mientras, el área de servicios industriales ha obtenido 325 millones de euros de beneficios.
El beneficio bruto de explotacion (EBITDA) ha alcanzado los 1.165 millones de euros, un 12,5% más que en el mismo periodo de 2020. Por su parte, el beneficio neto de explotación ha sido un 12,1% superior, hasta los 775 millones de euros.
Pese a ello, su cifra neta de negocio ha caído un 2,8%, desde los 20.955 millones hasta los 20.365 millones de euros.
La deuda neta de ACS se ha incrementado hasta los 3.573 millones de euros desde los 2.679 millones que tenía en diciembre de 2020. Esta cifra no incluye la caja del negocio industrial, que ascendía a 859 millones de euros al cierre de 2020, por su acuerdo de venta a Vinci en marzo de 2021
