La enfermera española que superó el virus del ébola, Teresa Romero, ha adoptado un cachorro tras el polémico sacrificio de Excálibur, el perro que tenía cuando se infectó.
Se llama "Alma" y es un cachorro. Su marido, Javier Limón, y ella lo han acogido después de que su perro Excálibur fuera sacrificado para evitar el riesgo de contagio del ébola, según argumentó la Comunidad de Madrid. Teresa Romero ha denunciado que la decisión se tomó sin comprobar si el animal estaba infectado y que, por ejemplo, en Estados Unidos, las mascotas de los afectados no corrieron la misma suerte sino que, por el contrario, se aislaron para poder estudiar le impacto del virus en sus organismos.
El sacrificio de Excálibur provocó un aluvión de críticas a las autoridades madrileñas y concentraciones de los defensores de los animales a las puertas del domicilio de Romero y Limón en el barrio de Alcorcón.
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