Italia no quiere ser España. Al menos así lo cree Matteo Renzi, el primer ministro italiano, quien ha asegurado ante la Cámara de Diputados que el “modelo a seguir para Italia no puede ser el de España, que tiene el doble de paro”.
"Estimo a España y a su presidente del Gobierno, pero cuando me dicen que nuestro modelo debe ser el de un país que tiene el doble del desempleo me preocupo", ha recalcado Renzi.
ESPAÑA, ¿MODELO A SEGUIR?
Ante los consejos de organismos internacionales como la OCDE, o de la propia Angela Merkel, quien ha recalcado en público el efecto de las reformas en España, Renzi ha asegurado que “Italia no puede imitar a otros países reduciendo el sueldo a los trabajadores porque implicaría una producción de baja calidad y la reducción del poder adquisitivo de la clase media”.
Italia se ha mostrado más favorable a replicar el modelo alemán y no en el español cuando los organismos internacionales le han requerido ejecutar más reformas.
MENOS IMPUESTOS AL 'ESTILO ZAPATERO'
El país tiene una tasa de desempleo 12,5 % en agosto y el Ejecutivo de Renzi tiene en mente aprobar una reforma laboral y otra de la Justicia, tras aprobar una reducción de impuestos. De esta manera, el Gobierno italiano consiguió que los trabajadores aumentaran sus nóminas en 80 euros mensuales, algo que no ha tenido el éxito esperado, y que recuerda a las medidas adoptadas por Zapatero en España al inicio de la recesión.
Lea también:
Renzi defiende el ritmo de las reformas en Italia a pesar de haber entrado de nuevo en recesión
El ministro de Economía reconoce que Italia tiene que bajar su previsión de crecimiento