• Califica las acusaciones a miembros de CiU de ‘intoxicación’
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La sombra de la corrupción se sigue cerniendo sobre el Govern de la Generalitat y el Ejecutivo de Artur Mas. La confesión del fundador de CiU, Jordi Pujol i Soley, de haber mantenido ocultos capitales en el extranjero durante más de 34 años destapó una desagradable caja de Pandora para los convergentes. Las informaciones sobre el cobro de comisiones del 3% o el 5% por mediar en concesiones de obras públicas u otras actividades salpican a el ex diputado de la formación -e hijo del ex líder catalán-, Oriol Pujol y otros hombres fuertes del partido, como el actual conseller de Empleo, Felip Puig han sido acusados de exigir pagos de este tipo.

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Sin olvidar el caso de Jordi Pujol Ferrusola, el primogénito del ex president de la Generalitat, cuya influencia y abuso de poder podría haber granjeado una gran fortuna a los Pujol Ferrusola, según las pesquisas que se están llevando a cabo por parte del juez Pablo Ruz de la Audiencia Nacional. Sin embargo, el caso que ahora ocupa es la denuncia de un empresario francés por la supuesta exigencia de Puig del cobro del 5% de comisión en la adjudicación de una obra en el Puerto de Barcelona.

Este hecho, recogido en un informe de la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales (UDEF), ha sido destapado por La Razón, que ha dedicado buena parte de sus portadas, en los últimos días, a afirmar que Puig se reunió con este empresario del país vecino para exigir estos pagos, un escándalo que estaría siendo investigado también por el juez Ruz.

Puig, por su parte, salió inmediatamente al paso de estas acusaciones, asegurando de manera contundente que estos hechos son “falsos” y que “nunca ha cobrado ni pedido comisiones”. Asimismo, ha explicado que jamás ha formado parte del consejo de administración del Puerto de Barcelona. Artur Mas también ha salido en defensa del conseller -que ha ostentado diversos cargos en los gobiernos de Pujol y de Mas durante los últimos 20 años-, y ha calificado el asunto de “rumorología”.

Durante su rueda de prensa para presentar los 10 ejes de actuación del Govern catalán durante los próximos meses, antes de las elecciones autonómicas del 27 de septiembre, Mas puso en duda la solidez de esta denuncia que ha tardado 12 años en llegar y ha explicado que “cuando aparecen rumores lo primero que hago es hablar con el afectado, él me lo ha negado y yo le tengo confianza”.

Mas: Las acusaciones de cobro de comisiones, ¿información o intoxicación?

Asimismo, ha insinuado que este tipo de rumores sobre el cobro de comisiones de miembros del Ejecutivo catalán y de CiU se ha preguntado, retóricamente si son “informaciones o intoxicación”, para acto seguido afirmar que “no se les puede llamar información”.

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LA DENUNCIA

La Razón ha desvelado que los hechos que investiga la Audiencia Nacional fechan de 2003, cuando Puig era conseller de Política Territorial i Obres Públiques. Según el diario que dirige Paco Marhuenda, el empresario habría recibido presiones para que efectuara el pago del 5% de la adjudicación de unas obras portuarias en Barcelona. Tras negarse a pagar, no obtuvo la obra pero recibió la visita de un detective de Método 3 que le amenazó con cobrar una deuda que él no tenía.

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Después de que Puig saliera en defensa propia y desmintiera esta noticia, el medio insistió en que el mismo conseller se habría reunido con el empresario.

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