- La polifacética cantante sorprende interpretando los grandes éxitos de 'Sonrisas y lágrimas'
Actores, directores, guionistas o montadores, especialmente si son galardonados, son las estrellas que más resplandecen en Hollywood la noche de los premios Oscar de cine. Pero el maestro de ceremonias suele llenar muchos titulares y Neil Patrick Harris no ha sido menos en la noche de su debut en el Dolby Theatre.
Opiniones encontradas en la red sobre la solvencia del actor, habitual maestro de ceremonias de los premios Tony o de otras galas de galardones com los Emmy. Patrick Harris ha arrancado la ceremonia con un número musical que ha levantado buenas críticas, pero ha ido perdiendo el tono, dejando una sensación general de no haber superado a su antecesora, Ellen DeGeneres.
Realmente no me gustó mucho la conducción de @ActuallyNPH @TNTLA #OscarEnTNT
— Lucía Sapena (@LuSapena) febrero 23, 2015
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El la gala, el actor se ha atrevido también con un número de magia y también ha salido desnudo a presentar, recordándonos a Dani Rovira durante la ceremonia de los Goya:
Unanimidad, en cambio, por el sorprendente número musical de Lady Gaga que ha dejado a más de uno anclado a su asiento en el patio de butacas del Dolby Theatre. Lejos de las extravagancias a las que la popular estrella del pop nos tiene acostumbrados, ha desempeñado una interpretación emotiva y con una técnica magistral de los éxitos de Sonrisas y lágrimas.
El otro nombre de la noche fue el de Patricia Arquette, que en su discurso de agradecimiento por el Oscar a mejor actriz de reparto por Boyhood, tuvo un momento reivindicativo por los derechos de las mujeres.