La caída de los precios del petróleo y las sanciones impuestas a Rusia tras la invasión de Ucrania han supuesto un verdadero reto para los rusos más adinerados. Tres de los cinco hombres más ricos de Rusia han visto caer su fortuna desde marzo de 2014.
La mayor parte de la fortuna de Abramovich no está ligada a empresas rusas
Las fortunas rusas han tenido que seguir estrategias de todo tipo para aminorar sus pérdidas en los últimos meses. Algunos no han conseguido proteger sus activos de la tormenta perfecta caída sobre Rusia.
Alisher Usmanov, de 61 años, nacido en Uzbekistán ha perdido casi el 25% de su fortuna, unos 4.500 millones de dólares desde marzo de 2014, según la consultora Wealth-X. Usmanov es accionista mayoritario de la compañía minera Metalloinvest.
Parecido camino ha seguido Mikhail Fridman, presidente de la firma de inversión Alfa Group, que ha visto evaporarse 2.700 millones de dólares de sus fondos, un 18% de su fortuna.
Los que, sin embargo, han logrado refugiarse a tiempo, han sido dos magnates muy conocidos: Roman Abramovich y Alexei Modashov.
En el caso del propietario del Chelsea y del grupo de inversión Millhouse, su fortuna no sólo no ha sufrido daños sino que ha crecido en 100 millones de dólares, ya que la mayoría de sus acciones y participaciones no están ligadas a compañías rusas. Por su parte, Alexei Modashov director de la compañía multinacional de acero y minería Severstal, ha aumentado sus ganancias en 1.600 millones de dólares.
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