Los inversores cada vez están más preocupados por dónde guardar sus ahorros. Ante la titubeante evolución de la economía mundial y los escándalos que han salpicado a algunos mercados, muchos optan por los fondos de inversión. En España, el patrimonio gestionado por estos vehículos de inversión ha escalada un 22,4%, hasta los 193.760 millones de euros, según AC Gestión.
Esta evolución se explica por el atractivo que han ganado estos productos en los últimos años. Los fondos de inversión son instituciones de inversión colectiva (ICC) que reúnen fondos de distintos inversores, o partícipes, para inyectarlos en diferentes instrumentos financieros. Además, su gestión y responsabilidad corre a cargo de una sociedad administradora que puede ser un banco o una institución financiera.
Al invertir en un fondo se obtiene un número de participaciones, las cuales diariamente tienen un precio o valor liquidativo, obtenido por la división entre el patrimonio valorado y el número de participaciones en circulación.
Éstas son las cinco claves que definen el funcionamiento de los fondos de inversión:
1. Ventajas
Los fondos de inversión cuentan con diferentes ventajas respecto a otros productos más complejos. La Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) aglutina a la mayoría de los fondos de inversión españoles y desgrana algunas características claves.
Los fondos de inversión cuentan con más seguridad, ya que aunque quiebre el banco que promueve el fondo, el inversor no se quedaría sin su dinero ya que el fondo no se encuentra dentro del balance de la entidad, sino que es un patrimonio separado.
Además, si el inversor necesita el dinero para obtener liquidez, desde Inverco aseguran que podrá disponer en 72 horas de su inversión.
Otra de las ventajas se encuentra en la diversificación de las inversiones, algo que permite controlar más el riesgo. Sobre la inversión mínima, desde Inverco destacan que la mayoría de los fondos tienen una suscripción mínima de 10 euros, a no ser que que se detalle lo contrario en el folleto.
Además, a diferencia de otras inversiones, los fondos están sometidos a un mayor control y supervisión, ya que están sometidos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), lo que les obliga a realizar auditorías externas periódicas.
2. Fiscalidad y costes
Uno de los mayores condicionantes que pueden llevar a los inversores a decantarse por uno u otro producto se refiere a los costes. El Gobierno ha modificado la normativa y ha reducido ya la carga de algunos productos, como los planes de pensiones. En el caso de los fondos de inversión, al contar con un mayor patrimonio, los partícipes encuentran menores tasas que los pequeños inversores ya que reducen los costes operativos.
Según la última información disponible en la CNMV, los fondos de inversión españoles cobran a sus partícipes una comisión media del 0,98% anual, frente al 2,25% que se fija como máximo legal.
Sobre la fiscalidad, estos productos cuentan con mejores condiciones. En este sentido, desde Inverco destacan el diferimento fiscal, algo que permite no pagar impuestos por los rendimientos obtenidos mientras no se venda el fondo a diferencia de los depósitos.
Otra de las cualidades se refiere a la exención fiscal en el traspaso. Es decir, se puede vender un fondo y comprar otro sin pagar impuestos por las plusvalías acumuladas.
3. Tipos de fondos
En este sentido, la tarta de los diferentes tipos de fondos de inversión en España se dividen así: el 67% están vinculados a renta fija y monetarios, el 10% a renta variable, el 15% son mixtos mientras que el 8% es de otra tipología.
Estos datos contratas con Europa y Estados Unidos, donde por ejemplo la renta variable escala al 36% y al 53%, tres y cinco veces más que en España, respectivamente.
4. Perfil del inversor
A tenor de los productos que prefieren los españoles, el del partícipe nacional es más conservador. Aún así, desde Inverco destacan que en 2014 se ha observado un desplazamiento hacia categorías con mayor riesgo por la mejora de las expectativas económicas.
Según la asociación, todas las categorías conservadoras (montearios, renta fija a corto plazo y garantizados) registraron reembolsos en septiembre que fueron compensados por las elevadas suscripciones que obtuvieron los fondos con alguna exposición a renta variable.
5. Rentabilidad
Ante la atonía que existe en el mercado de los depósitos, el éxito de los fondos de inversión se explica por su mayor rentabilidad. En el mes de septiembre, la rentabilidad anual de los fondos de inversión se situó en el 5,4%, mientras la deuda española no alcanza el 2% a 10 años y los depósitos bancarios, en su mayoría, se encuentran por debajo del 1%.
Además, fuentes de la asociación destacan que la rentabilidad no depende de la cantidad, ya que todos los inversores consiguen la misma sea cual sea su cantidad inyectada.
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