El GBP/USD terminó realizando, ayer jueves, una señal para un rebote tras acercarse al soporte de los 1,40. A pesar del repunte del corto plazo hay que vigilar muy de cerca los niveles clave de demanda que se encuentran en los 1,3835, mínimos anuales. Mucho cuidado con el abandono de este nivel de precios ya que nos haría pensar en una continuación de los descensos a largo plazo. No volveremos a ver una señal de fortaleza mientras que se mantenga cotizando por debajo de los 1,4769, niveles en donde se encuentra la media de 200 sesiones.