- Algunos expertos señalan que la crisis se podría extender a 2016
El fracaso de la banca internacional en las negociaciones para la compra de la deuda inpagada por Argentina a los denominados 'fondos buitre' y el rechazo de la presidenta del país latinoamericano, Cristina Fernández de Krichner a considerar un impago parcial podrían provocar que la crisis de deuda se extienda hasta 2015.
En un primer momento, los analistas apuntaron a que la crisis sería corta. La intermediación de bancos como Citigroup, JP Morgan, HSBC o Deustche Bank, hicieron sugerir que la situación se solucionaría en días o, incluso, semanas.
Argentina se ha negado a aceptar este impago parcial de la deuda reestructurada alegando que los fondos que no aceptaron la quita no deben beneficiarse de un pago del 100% de la deuda cuando otras entidades aceptaron una refinanciación que se traducía en una quita del 65%.
Además, el Gobierno de Cristina Fernández también ha señalado que no podrá pagar a los fondos buitre hasta pasado el 31 de diciembre porque, de hacerlo, se activaría una cláusula que supondría un desembolso millonario para las arcas argentinas.
En el momento de negociar la refinanciación de la deuda, Argentina acordó con los 'fondos de buena fe' que ofrecería una compensación en el caso de que llevara a cabo acciones más ventajosas con fondos que no aceptaron la quita.
ALGUNOS EXPERTOS SEÑALAN 2016 COMO EL AÑO EN EL QUE TERMINARÁ LA CRISIS
De todos modos, el primer argumento podría provocar que, incluso con el vencimiento de la cláusula, Argentina siga negándose a pagar la deuda. Por este motivo, muchos analistas consideran que la crisis podría alargarse un año más, hasta 2016.
Estos analistas señalan que como el mandato de Cristina Fernández termina en diciembre de 2015, habría que esperar a que se constituya un nuevo ejecutivo en el mes de enero de 2016 para ver cómo se pone fin a esta crisis.
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