- Tanto el rey como la institución inciden en el respeto a las acciones de los jueces
La Casa del Rey ha preferido mantener el silencio tras la imputación de la infanta Cristina por dos delitos fiscales por el caso Nóos. Aún así, la institución ha asegurado que manifiesta "su respeto absoluto" por la independencia del poder judicial.
Desde el momento en el que la Casa Real calificó de 'no ejemplar' a Urdangarin, Cristina ha desaparecido
El “martirio” que supuso la implicación de la infanta Cristina en los negocios de su marido, según aseguró el anterior jefe de la Casa Real, Rafael Spottorno (implicado en las tarjetas opacas de Caja Madrid) ha conllevado que la hija del rey Juan Carlos haya sido apartada de los actos oficiales.
Desde el momento en el que la institución calificó de “no ejemplar” el comportamiento de Iñaki Urdangarin en diciembre de 2011, su mujer también fue separada de las actividades reales.
RESPETO POR LAS DECISIONES JUDICIALES
En abril de 2013, cuando el juez Castro decidió llamar a declarar a la infanta Cristina en calidad de imputada por presunta complicidad con su esposo, la Casa Real expresó su "sorpresa" y manifestó su malestar por haberse enterado por los medios de comunicación de la decisión. Aún así, también aseguró tener el "máximo respeto" por las decisiones judiciales, una idea que también comparte el Gobierno, según la vicepresidenta del Gobierno.
Tras la llegada al trono de Felipe VI, el nuevo monarca también ha manifestado en varias ocasiones su “respeto a las decisiones judiciales” aunque en esta última ocasión ha preferido no postularse.
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