Todos los rumores apuntan a que Leopoldo González-Echenique dejará su cargo como presidente de RTVE el jueves tras habérselo comunicado a la propia vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría. El máximo responsable del ente público habría tomado la decisión tras no haber encontrado los apoyos necesarios para llevar a cabo los recortes que le exige Hacienda para poder cuadrar sus cuentas tras ser rescatada por el Gobierno.
Según destacan varios medios, Echenique se ha sentido acorralado ante la falta de entendimiento tanto fuera como dentro de RTVE. Fuentes del ente público ni han confirmado ni desmentido su salida, aunque se da por hecho.
Mientras sus empleados amenazan con importantes huelgas si hay más recortes, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, le ha exigido nuevas medidas de austeridad para poder cumplir con los presupuestos pactados con el Gobierno.
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Leopoldo González-Echenique necesita 130 millones de euros en las próximas semanas para evitar que la Corporación que preside entre de nuevo en causa de disolución. RTVE ya acarrea 830 millones de déficit en los últimos tres años.
El Consejo se reunirá el jueves finalmente y si, finalmente no se da luz verde a los números que presente el todavía presidente de RTVE, Echenique abandonará su cargo.
EL SUELDO DE GONZÁLEZ-ECHENIQUE
Aunque Echenique se ha negado a contestar abiertamente en las sesiones parlamentarias para concretar su sueldo, algunos diputados han manifestado en varias ocasiones que su salario ascendería a 21.600 euros mensuales en 14 pagas, es decir, 302.400 euros, lo que le convertiría en el funcionario mejor pagado del Estado.
¿BURUAGA DE SUSTITUTO?
Muchas fuentes apuntan a la posibilidad de que RTVE rescate a Ernesto Sáenz de Buruaga para sustituir a Leopoldo González-Echenique por la buena sintonía que existiría con la vicepresidenta del Gobierno.
El periodista burgalés abandonó en julio la cadena Cope tras las supuestas presiones de la emisora episcopal para que evitara hablar de “mucha política” en su programa matinal para evitar suspicacias en La Moncloa.
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