Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, ha respondido a las críticas de Donald Trump después de que el banquero central italiano haya anticipado que tomarán todas las medidas que sean necesarias para impulsar la inflación en la zona euro hacia su objetivo del 2%.
"Nuestro objetivo no es alterar los tipos de cambio, sino la estabilidad de los precios", ha sentenciado Draghi en respuesta a la pregunta de una periodista sobre las críticas de Trump a su discurso pronunciado esta mañana en el Fórum sobre política monetaria que organiza el BCE anualmente en Sintra, Portugal.
"Mario Draghi acaba de anunciar que podrían llegar más estímulos, lo que inmediatamente hizo que el euro cayera frente al dólar, lo que les facilitó injustamente la competencia contra los Estados Unidos. Han estado saliéndose con la suya durante años, junto con China y otros países", ha escrito Trump en su cuenta de Twitter.
Un comentario que no ha sido aislado, ya que el ataque del presidente de EEUU a Dragui ha ido más allá. En otro comentario, Trump ha aprovechado para insistir en que "los mercados europeos subieron gracias a los comentarios (injustos para los EEUU) realizados hoy por Mario D!".
Mario Draghi just announced more stimulus could come, which immediately dropped the Euro against the Dollar, making it unfairly easier for them to compete against the USA. They have been getting away with this for years, along with China and others.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 18 de junio de 2019
European Markets rose on comments (unfair to U.S.) made today by Mario D!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 18 de junio de 2019
Además de Mario Draghi, el ex vicepresidente de la Reserva Federal de EEUU (Fed), Stanley Fischer, ha criticado abiertamente las presiones que está recibiendo Jerome Powell, actual presidente del banco central, por parte de Donald Trump.
Fischer ha participado en un panel junto a Mario Draghi y al gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, y ha aprovechado la ocasión para señalar que "la Fed no debe recibir órdenes del presidente de Estados Unidos". En su opinión, es fundamental mantener la independencia de los bancos centrales para que la política monetaria funcione de manera correcta.