- Las infecciones pueden producirse de persona a persona o de animal a persona
- Se contagia por contagio directo con fluidos de personas infectadas
- El periodo de incubación dura entre 2 y 21 días
El ébola es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa y muy grave, que afecta tanto animales como a personas y causa fiebre hemorrágica. No se transmite por vía aérea, como la gripe y otras enfermedades, sino que se tiene que dar un contagio directo con cualquier fluido corporal de un infectado, como sangre, sudor, orina, saliva, vómito o semen. | Sigue aquí en directo todo lo que ocurre en España con el primer caso de contagio.
Las infecciones se pueden producir de persona a persona o de animal a persona. También puede haber un contagio cuando una persona sana con heridas abiertas entra en contacto con un entorno contaminado, por esta razón el personal sanitario expuesto al contagio debe ir siempre protegido.
No hay riesgo por estar al lado de una persona con el virus o viajar en el mismo medio de transporte. No obstante, si la sangre o el vómito de un infectado entra en contacto con los ojos, la nariz o la boca de una persona sana sí hay riesgo de transmisión. El ébola también sobrevive en superficies de objetos que estén contaminados por fluidos infectados.
El periodo de incubación dura entre 2 y 21 días, aunque los infectados no contagian durante esta fase. Una vez el virus desaparece de la persona, sigue habiendo riesgo de contagio por contacto directo durante varias semanas.
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SÍNTOMAS
El primer síntoma del ébola es la fiebre repentina, seguida de debilidad corporal, dolores musculares y de cabeza y, por último vómitos y diarrea. Si no se logra controlar el virus tras estos síntomas, aparecen erupciones cutáneas y hemorragias internas y externas.
La única forma de confirmar la infección es a través de pruebas de laboratorio.
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