- Los republicanos supeditan su decisión a la declaración inmediata de la independencia
- Unió sigue coqueteando con el PSC
- ICV y CUP se mantienen al margen
Siguen las tensiones entre el deshecho bloque soberanista y las entidades de la sociedad civil. CDC, Unió, ERC, ICV y la CUP, por un lado, buscan alianzas y la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, por otro, intentan que todos concurran en una única candidatura en los comicios autonómicos.
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De momento, se van perfilando dos frentes. Por un lado, la ANC y CDC parece que podrían formar una lista conjunta, a la que seguramente se sumaría Òmnium Cultural. Por otro, ICV-EUiA y la CUP se desmarcan. Para acabar de aderezarlo, Unió y el PSC exploran un nuevo pacto de gobierno.
El papel de Unió en esta coalición no está claro, de hecho su líder, Josep Antoni Duran y Lleida, tiró de ironía ante la pregunta sobre la lista conjunta y un país presidido por la ANC: “Mi imaginación no llega a tanto, pero todo es posible en esta vida", se limitó a contestar Duran.
La participación de esta fuerza se supeditaría a la entrada de ERC y a la imposición de la única condición que piden los republicanos: que una hipotética victoria de esta candidatura equivalga a una “DIU”: la Declaración Unilateral de Independencia de inmediato.
Tal y como explica La Vanguardia, los convergentes no se sienten nada cómodos con esta opción. Prefieren la apertura de un proceso de negociación con el Estado español, que coincidiría en el tiempo con otra negociación paralela con la Unión Europea y con la preparación de las estructuras de Estado necesarias. "El objetivo real no es declarar la independencia, sino conseguirla, y es un proceso previo de negociación lo que le da rigor y seriedad", sostuvo el coordinador general de CDC, Josep Rull.
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SOCIOVERGENCIA
Unió, mientras tanto, ha estado flirteando con el líder del PSC, Miquel Iceta, para propiciar la famosa sociaovergencia. Pero parece que Mas no está por la labor de pactar con los socialistas, quienes podrían brindar su apoyo a CiU para pactar los presupuestos catalanes y ofrecer un nuevo pacto de gobierno.
Recoge EFE que el mismo Iceta ha reconocido que la opción de ese pacto de estabilidad con CiU es una posibilidad que, en estos momentos, está "muy verde", ya que, ha recordado, es algo que "depende del presidente catalán, Artur Mas, y no de Duran"
Si embargo, el president tendrá que volver a considerar esta opción tras la amenaza de Oriol Junqueras de cargarse el acuerdo con los convergentes y no votar los presupuestos.
ICV y la CUP
La lista impulsada por la ANC no cuenta con las simpatías ni de David Fernández ni de Joan Herrera. Los líderes d la CUP y de ICV ven esta maniobra como un nuevo golpe de efecto de Mas para salvar su carrera política y han descartado sumarse.
Herrera ha sido especialmente crítico con la propuesta de la consulta alternativa de Mas a quien ha acusado de juegar “con las medias verdades y a veces acaban siendo mentira".
Un baile de formaciones, de declaraciones cruzadas y de alianza que seguirá en las próximas semanas y que hacen prever un destino de Cataluña que en estos momentos está en manos de las presidentas de la ANC y Òmnium, Carme Forcadell y Muriel Casals.
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