- Wolfgang Schaeuble instó al Gobierno griego a aprovechar el tiempo para poner en práctica sus planes de reforma
- Jeroen Djisselbloe advirtió a Grecia que tiene que empezar a adoptar las reformas económicas exigidas por sus acreedores
Alemania y el resto de la Zona Euro están comenzando a presionar a Grecia, instándole a poner en práctica las reformas prometidas para conseguir la extensión de cuatro meses a su programa de ayuda. Sin embargo, y con sus declaraciones, Grecia sólo ha conseguido este fin de semana posicionarse aún más lejos de sus compañeros de grupo.
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Recordamos que el Gobierno alemán aprobó la extensión de rescate a Grecia el viernes. Esta aprobación no significa, sin embargo, que Grecia esté bajo menos presión para reformar su economía y la forma de hacer sus negocios.
Según informa CNBC, este domingo el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, instó al Gobierno griego a aprovechar el tiempo para poner en práctica sus planes de reforma si quiere asegurarse ayuda futura desde el extranjero. Mientras tanto, en una entrevista con el Financial Times el domingo, Jeroen Djisselbloe, líder del Eurogrupo, advirtió a Grecia que tiene que empezar a adoptar las reformas económicas exigidas por sus acreedores si quiere recibir el tramo restante de la ayuda de su programa de rescate.
Wolfgang Schaeuble, instó al Gobierno griego a aprovechar el tiempo para poner en práctica sus planes de reforma si quiere asegurarse ayuda futura desde el extranjero
Por su parte, en declaraciones a la CNBC este lunes, el ministro de Finanzas de Luxemburgo, Pierre Gramegna, ha dicho que se había sido flexible con Grecia y que ahora el país necesita hacer su parte para mantenerse dentro del plan de rescate.
En cuanto a la visión de los analistas al respecto, los expertos de Link Securities señalan en su informe de este lunes que “los inversores seguirán atentos a los acontecimiento en Grecia, donde la coalición radical de izquierdas en el poder está teniendo problemas para explicar los acuerdos alcanzados con sus socios y acreedores para extender por cuatro meses el actual programa de rescate, programa que sigue condicionado a la ejecución de una serie de reformas y que sigue, a pesar de lo dicho por el nuevo Ejecutivo griego durante y después de la campaña electoral, supervisado por la tan denostada troika de acreedores”.
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