A pesar del buen comportamiento del Ibex esta semana seguimos a años luz del resto de los grandes índices. Algo que viene de muy lejos y que no tiene visos de cambiar.
Donald Trump ha vuelto esta semana a la carga y ha puesto sobre la mesa los aranceles a los productos extranjeros. Un tema que casi había quedado en el olvido con la crisis mundial desatada por el Covid-19. El país norteamericano ha informado que va a mantener los aranceles que impuso a la Unión Europea en un 15% para los productos de aviación civil y un 25% para los demás, por un valor de 7.500 millones de dólares.
A pesar del rebote con el que iniciaban las bolsas la semana, cerrando muy lejos de los máximos, nuestro selectivo sigue mostrándose mucho más débil que cualquiera de nuestros vecinos y ya no hablemos si nos comparamos con Wall Street.
La incertidumbre en la economía de las familias españolas derivada de la pandemia por el Covid-19 y de las medidas para atenuar sus efectos, como los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) han hecho que durante los últimos meses las decisiones de compra se hayan paralizado o, incluso, llegar a suspenderse, con lo que la demanda de créditos, especialmente los destinados al consumo, se ha frenado en seco.
