photo d archives de la secretaire d etat au tresor americain janet yellen

La Secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, ha asegurado que el país se quedará sin liquidez el próximo 5 de junio, cuatro días más tarde de su anterior estimación, ya que en los días previos había fijado la fecha de un posible impago ('default') en el 1 de junio. Mientras, los negociadores de los dos principales partidos políticos del país siguen acercando posturas en busca de un acuerdo sobre el techo de deuda.

"Ahora estimamos que el Tesoro tendrá recursos insuficientes para cumplir con las obligaciones del gobierno si el Congreso no ha elevado o suspendido el límite de la deuda antes del 5 de junio", ha destacado en una carta dirigida a los miembros del Congreso.

En la misiva destaca que "durante la semana del 5 de junio, el Departamento del Tesoro está programado para realizar pagos y transferencias estimados en 92.000 millones de dólares, incluido un ajuste trimestral programado regularmente que resultaría en una inversión en los fondos fiduciarios del Seguro Social y Medicare de aproximadamente 36.000 millones", por lo que los recursos que tiene proyectados "serían inadecuados para satisfacer todas estas obligaciones".

Yellen asegura que el Tesoro ya ha recurrido a una "medida extraordinaria" para hacer frente a sus obligaciones, como es "un canje de aproximadamente 2.000 millones de dólares de valores del Tesoro entre el Fondo de Retiro e Incapacidad del Servicio Civil y el Banco Federal de Financiamiento".

"Si bien esta medida no se ha utilizado desde 2015 debido a su tamaño limitado, el nivel extremadamente bajo de recursos restantes exige que agote todas las medidas extraordinarias disponibles para evitar ser incapaz de cumplir con todos los compromisos del gobierno", añade.

Según su criterio, "esperar hasta el último minuto para suspender o aumentar el límite de deuda puede causar un daño grave a la confianza de las empresas y los consumidores, aumentar los costos de endeudamiento a corto plazo para los contribuyentes e impactar negativamente en la calificación crediticia de los Estados Unidos".

"De hecho, ya hemos visto que los costos de endeudamiento del Tesoro aumentan sustancialmente para los valores que vencen a principios de junio. Si el Congreso no aumenta el límite de la deuda, causaría graves dificultades a las familias estadounidenses, dañaría nuestra posición de liderazgo mundial y generaría dudas sobre nuestra capacidad para defender nuestros intereses de seguridad nacional", concluye.

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