- Varios viajeros grabaron la secuencia en la que el personal de seguidad de la aerolínea arrastraba a un hombre a la fuerza
- El motivo, la necesidad de que varias plazas fuesen ocupadas por miembros de la tripulación
La aerolínea United Airlines protagonizó el pasado domingo por la noche un nuevo incidente al expulsar violentamente a un pasajero de un avión. El vídeo, que fue grabado por diversos viajeros y colgado posteriormente en las redes sociales, muestra cómo un hombre es sacado de la cabina a rastras ante las protestas del resto de viajeros.
Según uno de los testigos, los hechos tuvieron lugar en un vuelo 3411 que debía cubrir la ruta desde el aeropuerto Internacional O'Hare de Chicago hasta Lousville (Kentucky), cuando personal de la aerolínea se personó a bordo pidiendo cuatro voluntarios para ceder su asiento a cambio de 400 dólares, una noche de hotel y un nuevo billete en un vuelo programado para el día siguiente. El motivo aducido era que precisaban dichas plazas para miembros de la tripulación, que debían llegar a tiempo a Louisville para próximos vuelos.
Al no salir ningún voluntario, se duplicó su oferta hasta los 800 dólares, pero tampoco así United Airlines logró convencer a nadie, por lo que la aerolínea eligió de forma aleatoria a los pasajeros. Tres de ellos abandonaros voluntariamente la aeronave, pero el último se negó a hacerlo, diciendo que era médico y tenía pacientes esperándole a la mañana siguiente.
Sin escuchar razones, miembros de seguridad de United Airlines le agarraron y le obligaron a salir de su asiento, arrastrándolo por el avión. Las imágenes filmadas por los pasajeros, y que se han viralizado en las redes sociales, muestran su cara ensangrentada y sus gritos oponiéndose a ser expulsado, ante la mirada atónita del resto del pasaje, entre ellos diversos niños.
@United overbook #flight3411 and decided to force random passengers off the plane. Here's how they did it: pic.twitter.com/QfefM8X2cW
— Jayse D. Anspach (@JayseDavid) 10 de abril de 2017
@united @FoxNews @CNN not a good way to treat a Doctor trying to get to work because they overbooked pic.twitter.com/sj9oHk94Ik
— Tyler Bridges (@Tyler_Bridges) 9 de abril de 2017
Óscar Muñoz, CEO de la compañía, ha asegurado que es un acontecimiento perturbador para United Airlines. "Me disculpo por tener que reacomodar a los clientes", ha dicho. Así, pide disculpas por haber incurrido en 'overbooking' -venta de billetes por encima de la capacidad del avión,- pero no por el trato dado al pasajero. Además, ha explicado que el equipo se ha tenido que desplazar con urgencia para trabajar con las autoridades y resolver este asunto. "Vamos a investigar lo que sucedió y queremos hablar directamente con el pasajero para resolver la situación", ha concluido.
United CEO response to United Express Flight 3411. pic.twitter.com/rF5gNIvVd0
— United (@united) 10 de abril de 2017
Uno de los pasajeros ha contado en redes sociales que uno de los miembros de seguridad golpeó la cara del pasajero contra el respaldo del asiento, lo que le causó una "grave hemorragia en su boca". Como consecuencia, el oficial ha sido suspendido y está bajo investigación y la aerolínea ha iniciado una investigación, precisamente de la que hablaba Muñoz.
Muñoz se ha limitado a señalar que el pasajero "desafió" a los agentes de seguridad que le pidieron que dejara el avión y deseó que la empresa pueda aprender una lección de lo ocurrido.
"Buscamos voluntarios y luego seguimos el proceso habitual, en el que se llega a ofrecer hasta 1.000 dólares como compensación. Cuando nos acercamos a uno de estos pasajeros para disculparnos y explicarle por qué se le niega el pasaje, levantó la voz y se negó a cumplir con las instrucciones de la tripulación", continuó Muñoz. El origen chino del pasajero desalojado ha creado malestar en multitud de internautas de ese país al considerar la expulsión de "racista".
Este martes, dos días después del incidente, el CEO de la compañía, Óscar Muñoz, ha vuelto a pronunciarse a través de un comunicado, que ha sido publicado por el Twitter de United Airlines.
"El acontecimiento realmente horrible que ocurrió en este vuelo ha suscitado muchas respuestas de todos nosotros: indignación, cólera, decepción. Comparto todos esos sentimientos, y uno sobre todo: mis más profundas disculpas por lo que pasó. Al igual que usted, sigo estando molesto por lo que sucedió en este vuelo y me disculpo profundamente con el cliente forzosamente removido y con todos los clientes a bordo. Nadie debería ser maltratado de esta manera".
De esta manera, continúa en el comunicado que asumen toda la responsabilidad y que seguirán trabajando para hacerlo bien. "Nunca es demasiado tarde para hacer lo correcto. He confiado en nuestros clientes y empleados que vamos a arreglar lo que está roto para que esto suceda de nuevo". Esto incluirá, según Muñoz, en hacer una revisión exhaustiva de la tripulación, de sus políticas para incentivar a los voluntarios en estas situaciones y "un examen de cómo nos relacionamos con las autoridades aeroportuarias y la policía local". Así, añade que los resultados se comunicarán antes del 30 de abril. "Les prometo que lo haremos mejor", concluye.
United CEO Oscar Munoz: I’m sorry. We will fix this. https://t.co/v8EPGsiDCi pic.twitter.com/eOPiYcagvo
— United (@united) 11 de abril de 2017
Por otro lado, el Departamento de Transporte de EEUU ya está investigando el indicente. Las acciones de la compañía han caído un 1,15% en Wall Street.
TRANSPORTA UN 3,2% MÁS DE PASAJEROS
Y en medio de esta polémica, la aerolínea ha dado a conocer que ha transportado a 33,1 millones de pasajeros hasta marzo, un 3,2% más que en el mismo período de 2016, con un nivel de ocupación del 79,6%, 0,3 puntos porcentuales menos, y un 20,3% más de transporte de carga, según ha informado el grupo en un comunicado recogido por Europa Press.
En concreto, la aerolínea principal transportó a 23,8 millones de pasajeros, un 6,9% más que en los tres primeros meses del año año pasado, con un factor de ocupación del 82,4% (0,5 puntos porcentuales más), mientras que las rutas regionales cayeron un 5,4%, hasta los 9,28 millones de pasajeros y una ocupación del 66,6%% (1,2 puntos porcentuales menos).
En cuanto a la oferta, aumentó un 2,6%, impulsada por el incremento del 5,4% en las plazas de la marca principal a nivel doméstico (+3,1%), frente a un 5,2% menos en las aerolíneas regionales del grupo. Además, los asientos ofertados crecieron a nivel internacional un 2,1%, destacando el aumento del 7,4% en el Pacífico, mientras que en el Atlántico cayó un 1,3%.
El 'holding' espera que los ingresos unitarios del primer trimestre sean aproximadamente los mismos en comparación con el primer trimestre de 2016. Y es que asegura que la demanda creció un 2,2% respecto a los tres primeros meses del año anterior, con una subida del 6% en el negocio principal y una bajada del 5,3% a nivel regional a nivel doméstico. En el aspecto internacional, aumentó un 0,5%, con un repunte del 3,8% en el Pacífico y un descenso del 2,8% en el Atlántico.