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Wall Street ha cerrado este martes con subidas (Dow Jones: +0,29%; S&P 500: +0,45%; Nasdaq: +0,75%) tras el discurso de Jerome Powell ante el Congreso de EEUU. Justo después de las palabras del presidente de la Reserva Federal (Fed), los tres principales índices neoyorkinos han tocado máximos históricos, pero no han conseguido terminar la sesión en esas cotas. El caso del S&P 500 ha sido especialmente significativo, ya que ha superado la barrera psicológica de los 3.000 puntos.
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Powell ha apuntado que las tensiones comerciales y la preocupación sobre la fortaleza de la economía global "siguen pesando sobre las perspectivas económicas de EEUU". Así, ha reforzando la tesis de una bajada de tipos en la reunión que el banco central estadounidense celebra a entre el 30 y 31 de julio.
El informe de empleo, presentado el pasado viernes, fue mejor de lo esperado, lo que puso en duda una rebaja de tipos a corto plazo. Powell ha reconocido que el crecimiento de la economía sigue siendo sólido, igual que la evolución del mercado laboral. Sin embargo, ha advertido que "las incertidumbres sobre las expectativas han aumentado en los últimos meses". El impulso económico se ha ralentizado en algunos países, lo que "podría afectar a la economía de EEUU", ha remarcado.
Este martes, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, reconoció que están debatiendo los pros y contras de dejar estar a la economía estadounidense ante la amenaza de que "se recaliente". A su vez, la presidenta de la Fed de Kansas, Esther George, afirmó que es improbable que la inflación suba pronto, por lo que mantener los tipos bajos mucho tiempo puede crear riesgos para la estabilidad financiera.
EMPRESAS Y OTROS MERCADOS
Dentro del Dow Jones, Chevron ha sido la compañía más alcista con un repunte del 1,69%, por delante de Pfizer (+1,57%) y Exxon Mobil (+1,43%). En el lado contrario de la tabla, Caterpillar es el valor más castigado, con una caída del 1,22%, seguida de Goldman Sachs (-0,87%) y Dow Inc (-0,67%).
Por su parte, el petróleo ha seguido con la tendencia alcista que registra desde el pasado 13 de junio, cuando se intensificaron las tensiones entre EEUU e Irán. El presidente estadounidense, Donald Trump, ha afirmado este miércoles que incrementará pronto las sanciones contra Irán serán forma "sustancial". Tras estas declaraciones, el barril West Texas se ha disparado un 4,36% al cierre del mercado estadounidense, hasta los 60,36 dólares.
Además, el rendimiento del bono estadounidense a diez años ha bajado hasta el 2,05% y se ha mantenido por debajo del bono a tres meses, que desciende hasta el 2,18%. El hecho de que la curva de tipos entre estas dos referencias se mantenga invertida anticipa un frenazo económico importante tanto en EEUU como en el conjunto del sistema económico mundial. Mientras tanto, en el mercado de divisas, el euro se ha apreciado un 0,39%, hasta los 1,1253 dólares.
