El deflactor de consumo privado PCE en Estados Unidos ha caído en marzo hasta el 4,2% en tasa interanual, tras cerrar febrero en el 5,1% (revisado al alza desde el 5%), según los datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Comercio estadounidense. En cuanto a la inflación subyacente, ha retrocedido hasta el 4,6%, una décima por debajo del registro de febrero, que fue revisado al alza.
Este descenso de la inflación PCE, uno de los indicadores seguidos más de cerca por la Reserva Federal, ha sorprendido en parte al mercado, que esperaba una caída menor en el índice general, hasta el 4,6%, aunque preveía un descenso mayor en la subyacente, hasta el 4,5%.
En términos mensuales, el avance ha sido del 0,1% para el índice general, que modera su crecimiento desde el 0,3% de febrero, mientras que la tasa subyacente mantiene constante la velocidad, tras anotarse en marzo otra subida del 0,3%, como ya hiciera en el segundo mes del año.
A lo largo del mes, los precios de los bienes disminuyeron un 0,2%, mientras que los servicios se encarecieron en la misma proporción, un 0,2%. El coste medio de los alimentos decreció un 0,2%, y los precios de la energía se contrajeron un 3,7%.
En los últimos 12 meses, los precios de los bienes aumentaron un 1,6%, mientras que los precios de los servicios incrementaron su coste un 5,5%. Los alimentos se encarecieron un 8,0%, y los precios de la energía disminuyeron un 9,8%.
Además, los ingresos personales aumentaron un 0,3% (67.900 millones de dólares) en marzo, y los ingresos personales disponibles aumentaron un 0,4% (71.700 millones). Por su parte, los gastos de consumo personal aumentaron menos del 0,1% (8.200 millones).
Según el organismo que difunde los datos "el aumento de los ingresos personales reflejó principalmente aumentos en las remuneraciones, los ingresos personales recibidos por activos y los ingresos por alquileres de las personas, que fueron compensados en parte por las disminuciones en los ingresos de los propietarios y los recibos personales de transferencias corrientes".
El aumento de las indemnizaciones estuvo liderado por los sueldos y salarios privados, y el aumento en los recibos de ingresos personales sobre activos reflejó un aumento en los ingresos por dividendos personales que fue parcialmente compensado por una disminución en los ingresos por intereses personales.
Asimismo, los gastos personales aumentaron en 21.500 millones en marzo, mientras que el ahorro personal fue de un billón, con la tasa de ahorro personal (ahorro personal como porcentaje del ingreso personal disponible) en el 5,1%.
Los analistas de Oxford Economics destacan que "la inflación continuó muy por encima de su tendencia previa a la pandemia", ya que "los precios del PCE general y básico aumentaron a una tasa intertrimestral más rápida en el primer trimestre, lo que demuestra que la Fed está lejos de declarar la victoria en su lucha contra la alta inflación".
"Esperamos que la Fed vuelva a subir en mayo, ya que la inflación sigue siendo elevada y la tensión ha disminuido en el sistema bancario, agregan.
Desde Pantheon Macroeconomics subrayan que "el número PCE clave para la Fed (servicios básicos ex-vivienda) se ve mucho mejor".
"Los funcionarios de la Fed han dejado en claro que un par de buenas lecturas no son suficientes para convencerlos de que la inflación excluida de los servicios básicos finalmente está cayendo a la baja, pero una cifra del 0,3% en abril, digamos, impulsaría la tasa anualizada de tres meses a la baja hasta el 3,6%", concluyen.