Las expectativas de inflación de los consumidores para los próximos 12 meses, que recoge la Universidad de Michigan en su sondeo sobre la confianza del consumidor, rebotaron en abril hasta el 4,6%, desde el 3,6% de marzo, y mantienen la oscilación que han presentado durante los últimos cuatro meses, en los que han alternado aumentos y disminuciones.
Por su parte, las expectativas de inflación a largo plazo se mantuvieron en el 2,9% por quinto mes consecutivo, y se movieron dentro del estrecho rango de 2,9-3,1 % durante 20 de los últimos 21 meses.
"La incertidumbre sobre las expectativas de inflación a corto plazo continúa siendo notablemente elevada, lo que indica que es probable que continúe la volatilidad reciente en la inflación prevista para el año siguiente. Los baches en las expectativas de inflación se limitan al corto plazo, ya que las expectativas de inflación a largo plazo se mantuvieron notablemente estables", destaca Joanne Hsu, directora de la encuesta.
En cuanto al índice del sentimiento del consumidor, en su lectura preliminar de abril ha registrado un aumento hasta los 63,5 puntos, desde los 62 alcanzados en marzo, aunque se mantiene por debajo de los 65,2 puntos de hace un año. También se ubicó por encima de la previsión de consenso, que esperaba que se quedara en los 62.
Desde Pantheon Macroeconomics señalan que "el modesto aumento en el índice general sugiere que la acción rápida y contundente de los políticos para detener las consecuencias de la crisis bancaria está ayudando a apuntalar la confianza, aunque el índice permanece por debajo de su nivel anterior a la crisis".
Por su parte, los analistas de Oxford Economics subrayan que estas cifras muestran "que la fortaleza continua del mercado laboral, el repunte de los precios de las acciones y la caída de los precios de la gasolina han superado con creces cualquier temor sobre el sector bancario".
"Sin embargo, el panorama general sigue siendo que la confianza del consumidor es moderada y todavía esperamos que el crecimiento del gasto del consumidor se desacelere a finales de este año a medida que las condiciones crediticias se endurecen y las condiciones del mercado laboral comienzan a debilitarse más marcadamente", agregan.
El índice de las condiciones económicas actuales también ha experimentado una subida hasta 68,6, frente al 66,3 previo, mientras que el componente de expectativas ha mejorado desde los 59,2 puntos de marzo hasta los 60,3.
