La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha asegurado este jueves que el fiscal Alberto Nisman no se suicidó y ha acusado a los supuestos autores de la muerte de provocar el incidente para cargar contra el Ejecutivo del país sudamericano, después de que Nisman acusara a la mandataria de estar implicada en negociar con Irán la impunidad de los terroristas de esa nacionalidad implicados en el atentado de 1994 contra la AMIA.
Cristina Kirchner ha publicado una entrada en su página web oficial en la que evalúa punto por punto la denuncia que presentó Nisman por su supuesto papel a la hora de encubrir a los autores de una masacre que costó la vida de 85 argentinos. En este sentido, Fernández de Kirchner ha asegurado que los espías a los que hacía referencia el fiscal “nunca han pertenecido a la Secretaría de Inteligencia” y aseguró que todo el revuelo causado por la muerte de Nisman se trata de una operación contra la Casa Rosada (la sede del Gobierno argentino).
La acusación de Nisman no sólo se derrumba, sino que constituye un verdadero escándalo político y jurídico.http://t.co/WALTcbRNbS
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) enero 22, 2015
“La denuncia del Fiscal Nisman nunca fue en sí misma la verdadera operación contra el Gobierno. Se derrumbaba a poco de andar. Nisman no lo sabía y probablemente no lo supo nunca. La verdadera operación contra el Gobierno era la muerte del fiscal después de acusar a la presidenta, a su canciller y al secretario general de La Cámpora de ser encubridores de los iraníes acusados por el atentado terrorista de la AMIA”, señala el escrito de la presidenta.
La acusación de Nisman no sólo se derrumba, sino que constituye un verdadero escándalo político y jurídico
“El estrépito de la denuncia, sumado al marco internacional por lo sucedido en Francia, que aún sin pruebas ni sustento, plagada de información 'plantada', quedaba sepultada por la muerte del fiscal. Eso sí, bajo la forma de aparente suicidio. Recurso que ya ha sido utilizado en muchos casos tristemente célebres”, añade. "En síntesis, la acusación de Nisman no sólo se derrumba, sino que constituye un verdadero escándalo político y jurídico. Y ahí está una de las claves. El Fiscal Nisman no sabía que los agentes de inteligencia que él denunciaba como tales, no lo eran", asegura Cristina Kirchner.
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