El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmará en las próximas semanas una orden ejecutiva que restringirá la inversión en sectores clave de la economía de China por parte de empresas estadounidenses, según una información de 'Bloomberg' elaborada con fuentes cercanas a la materia.
El mandatario tiene la intención de hacer públicas las medidas antes de una cumbre del G7 que comenzará el 19 de mayo en Japón, si bien ya habría informado sobre sus intenciones a sus socios de las siete principales economías globales, y espera obtener su respaldo en dicho encuentro, aunque descarta que otro país incorpore restricciones similares.
Estas medidas marcarían una nueva fase en las relaciones entre Estados Unidos y China, que ya atravesaron tensiones comerciales durante el gobierno de Donald Trump, quien incorporó aranceles sobre las importaciones procedentes del gigante asiático. Además, en los últimos meses se ha especulado con posibles restricciones a la exportación de compañías tecnológicas estadounidenses consideradas clave.
La orden ejecutiva que prepara Biden se enfocará en los semiconductores, la inteligencia artificial y la computación cuántica, para aquellas firmas estadounidenses que desempeñen un papel activo en la gestión, lo que afectaría también a las empresas conjuntas.
El presidente pretende prohibir por completo ciertos tipos de inversión, mientras que otras requerirán de una notificación previa al Gobierno. Las fuentes aseguran que esta medida pretende ahogar la financiación crítica y los conocimientos técnicos que podrían mejorar las capacidades militares de China.
