El huracán Laura que está afectando de lleno a EEUU ha tenido su impacto también en el mercado de las materias primas. El temor a que pueda provocar un daño catastrófico está haciendo que el petróleo cotice en máximos que no tocaba desde hace cinco meses. Algo a lo que también ha contribuido que las reservas de crudo en EEUU hayan caído más de lo previsto.
Las áreas costeras en Texas y Louisiana están preparándose para vientos huracanados y grandes. Las autoridades, por su parte, han advertido de una "marejada ciclónica potencialmente mortal" que podría llegar a 30 millas tierra adentro y causar inundaciones repentinas generalizadas. Además, se han evacuado cientos de instalaciones petroleras en alta mar en EEUU, lo que ha generado temores de escasez.
En concreto, los productores de petróleo evacuaron 310 instalaciones en el Golfo de México, cerrando el 85% de la producción en alta mar. La noticia ha llevado los contratos de futuros de petróleo a sus precios más altos desde principios de marzo.
"Gran parte de la producción de petróleo en el área ya se ha cerrado y hay preocupaciones obvias de que se produzcan más daños", afirman los analistas de Deutsche Bank. "Los mercados están valorando actualmente una posible escasez catastrófica de crudo a corto plazo", aseguran desde AxiCorp, como recoge Reuters.
