El oro ha subido un 1,9% este martes, y ha llegado a alcanzar una cotización de 2.036 dólares por onza, lo que supone su nivel más alto de los últimos doce meses, debido a varios factores, entre los que los analistas destacan "el giro a la baja del dólar" o la "debilidad" de los datos económicos de Estados Unidos, que incrementan el temor a una posible recesión en el país.
"El oro continúa aprovechando cualquier oportunidad para un repunte, y el giro a la baja de esta tarde para el dólar ha resultado en un máximo de doce meses para la materia prima. El tema de 2022 de un dólar en alza golpeó con más fuerza al oro, pero ahora que el dólar sale y la inflación disminuye, parece que finalmente ha llegado el momento de que el metal brille", destaca Chris Beauchamp, analista jefe de mercado de la plataforma de comercio en línea IG.
El analista señala además que "el oro ha subido tras algunos datos más débiles de EEUU", como la a encuesta JOLTS de ofertas de empleo publicada este martes, muy seguida por los inversores para determinar la evolución del mercado laboral estadounidense, que ha mostrado un descenso de las vacantes hasta los 9,9 millones, mientras que el consenso esperaba que se ubicaran en 10,5 millones.
"Los precios del oro han subido después de los datos JOLTS de hoy y la caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro de EEUU, alcanzando un nuevo máximo de 52 semanas por encima de los 2.010 dólares la onza, ya que parece acercarse a los máximos de 2.070 dólares que vimos en marzo del año pasado", destaca Michael Hewson, director de análisis de CMC Markets en Londres, quien agrega que "el dólar estadounidense más débil ha ayudado a impulsar algunos de los movimientos al alza de esta semana".
El oro ha conseguido superar los 2.000 dólares por onza en varias jornadas del último mes, una cota que no tocaba desde hace casi un año, ya que el 18 de abril de 2022 alcanzó los 2.003 dólares.
Por su parte, Craig Erlam, analista sénior de Oanda, encuentra en la fortaleza del dólar "una señal de que los operadores no se están moviendo de su opinión de que las tasas de interés de EEUU están en su punto máximo o cerca de él, y esperan que bajen este año".
"Un movimiento por encima de esto traería máximos históricos alrededor de 2.070 dólares, pero eso puede depender de que las expectativas de tasas de interés futuras se reduzcan aún más y de que haya más aversión al riesgo en los mercados", agrega.