La volatilidad vuelve a instalarse en el mercado del gas natural. Después de varias semanas consecutivas de caídas, los precios del Title Transfer Facility (TTF) neerlandés de referencia han subido alrededor de un 20% este martes, hasta alcanzar los 36 euros por megavatio hora.
Este aumento de los precios ha venido provocado por las interrupciones prolongadas de suministro en plantas y campos clave de gas de Noruega como Ormen Lange, Nyhamna y Aasta Hansteen, que permanecerán fuera de servicio hasta mediados de julio.
Estos movimientos ponen de manifiesto que el mercado sigue siendo sensible a los choques de oferta, mientras que los operadores tratan de equilibrar una demanda industrial, cuya recuperación aún es lenta, con los altos niveles de inventario, a medida que Europa se prepara para afrontar el próximo invierno.
"Los precios del gas natural, que habían bajado mucho por la mañana, se revirtieron bruscamente justo después del mediodía y alcanzaron máximos de seis semanas después de que se extendieran los cortes en tres plantas de gas noruegas debido a problemas técnicos, una señal de cuán voluble es actualmente el mercado del gas cuando se trata de preocupaciones sobre el suministro", señala Michael Hewson, analista jefe de mercado en CMC Markets.
Además de los cortes en las instalaciones noruegas, los precios también se han visto sacudidos por las previsiones de un clima inusualmente más cálido en el Viejo Continente.
Si bien la Unión Europea está cerca de cumplir con su objetivo de que sus reservas de gas estén llenas en un 90% en noviembre, a los operadores les preocupa que las demandas a corto plazo puedan afectar a este plan y ya se están preparando para la posibilidad de un mercado más ajustado, con precios más altos que a principios de este mes.
Según datos del Aggregated Gas Storage Inventory (AGSI+) de Gas Infrastructure Europe (GIE), se estima que el almacenamiento comunitario se encuentra al 72,27% de su capacidad en estos momentos, con países como España, Suecia o Portugal superando el 90%.