Tras la reunión del Banco Central Europeo (BCE) de este jueves, la probabilidad implícita de una subida de tipos en julio pasó del 50% al 80%, lo que provocó una subida del euro/dólar. El par alcanzó 1,0950 (ahora se sitúa en 1,0941) y ha subido más de un 3% desde principios de este mes.
"Las perspectivas a medio plazo siguen siendo alcistas para el euro/dólar debido a la divergencia entre un BCE claramente 'halcón' y una Reserva Federal (Fed) agotada. El próximo objetivo alcista se sitúa en 1,12", comenta Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank.
Por su parte, el dólar estadounidense cayó afectado por el debilitamiento de las ventas minoristas, el aumento de las solicitudes de subsidio de desempleo, la ralentización de la producción industrial y, quizás también, por un euro más fuerte tras las previsiones de inflación más elevadas del BCE, comenta esta analista.
Por otra parte, el euro/yen ha superado la barrera de los 150 tras la decisión de tipos de hoy del Banco de Japón.
"El BoJ ha decidido no hacer nada con respecto a sus tipos de interés, anormalmente bajos, lo que parece aún más anómalo si se tiene en cuenta que el resto de los principales bancos centrales están subiendo los tipos o dicen que lo harán", afirma Ipek.
"El dólar/yen ha vuelto a superar la barrera de los 140, ya que los operadores ven pocas razones para comprar yenes cuando las perspectivas del Banco de Japón siguen siendo borrosas. Hay que tener en cuenta que algunos inversores esperaban al menos una política más amplia del YCC hasta el 1%, pero el BoJ ni siquiera se molestó en hacer un cambio al respecto", añade.