El petróleo continúa recuperándose tras las fuertes caídas de mediados de la semana pasada. Este lunes sube alrededor de un 1% (Barril Brent: $67,29; Barril WT: $57,24) mientras continúa hablándose de la decisión de Arabia Saudí y el resto de grandes productores de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) de recortar la producción en diciembre.
A pesar de esta medida, la confianza del mercado sigue siendo débil y la volatilidad se ha impuesto en el precio del crudo. Hay dudas sobre la efectividad de la medida prevista por el cártel, mientras que Estados Unidos presiona para que no la lleve a cabo.
"El mercado espera que el recorte de la OPEP sea considerable", señala Stephen Innes, jefe de operaciones para Asia Pacífico de Oanda.
La OPEP plantea un recorte de la producción, en el que también participen los países aliados, con Rusia, de entre 1 millón y 1,4 millones de barriles por día para ajustar la desaceleración del crecimiento de la demanda y prevenir el exceso de la oferta.
A pesar de las subidas en el crudo de este lunes, y también del pasado viernes, éste se mantiene muy por debajo de los máximos cercanos a los 87 dólares (el barril Brent) que se registraron en octubre, en medio de dudas tanto sobre la debilidad de la demanda como sobre el exceso de oferta.
En lo que respecta a la demanda, las importaciones de petróleo de Japón en octubre cayeron un 7,7% con respecto al mismo mes del año pasado, hasta 2,77 millones de barriles por día. En cuanto a la oferta, es destacable que continúa aumentando la producción estadounidense. Así, las productoras de EEUU añadieron dos plataformas petroleras en la semana del 16 de noviembre, lo que eleva la cifra total a 888, el nivel más alto desde marzo de 2015.