El precio del barril de West Texas se ha recuperado en la jornada del martes, siguiendo el lunes negro del 24 de agosto, cuando se depreció más de un 4,5% en el día. El oro negro se ha estabilizado en torno a los 39 dólares por barril.
Desde JDF Brokers señalan que “es especialmente remarcable que los precios del West Texas llevan nueve semanas seguidas de pérdidas, el período mayor de caídas consecutivas desde 1986”.
En este contexto, los expertos de esta firma creen que está claro que los precios del petróleo aún se están viendo afectados por el sentimiento bajista que inunda los mercados, causado por la preocupación hacia la economía en China, que es un consumidor de petróleo clave.
Mientrastanto, la OPEC ha continuado incrementando sus niveles de producción, hasta 32 millones de barriles de petróleo por día, a pesar de la inundación que ha experimentado el mercado.
MAYOR DECLIVE EN LOS PRECIOS DEL CRUDO
Lo único que cabe decir es que el “oro negro” no presenta ningún tipo de soporte hasta la zona de los $33, coincidiendo con los mínimos de 2009
Según estos expertos, los precios continuarán experimentando presión en los próximos días y podríamos ver el barril de West Texas a 36,50 dólares.
El barril brent, el de referencia, se ha desplomado un 60% desde los máximos de 2014 y desde los máximos de junio de este año, el petróleo se ha abaratado un 35%. Los expertos lo tienen claro: no hay ninguna señal de fortaleza que augure una recuperación. José María Rodriguez, analista técnico de Bolsamanía, explica que “llegados a este punto lo único que cabe decir es que el “oro negro” no presenta ningún tipo de soporte hasta la zona de los $33, coincidiendo con los mínimos de 2009”.
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