El petróleo ha subido ligeramente este lunes (barril Brent: $76,49; Barril WT: $66,12). Sin embargo, a lo largo de la jornada ha caído arrastrado por el incremento de la producción rusa y el aumento de la actividad de perforación en Estados Unidos, que alcanzó su nivel más alto en más de tres años.
Los inversores siguen pendientes de este incremento en la producción de los países de fuera de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), empezando por Estados Unidos. Sin embargo, también están cautelosos de cara a lo que los propios miembros de la OPEP puedan decidir en su reunión del próximo viernes.
JP Morgan es bajista con respecto a las perspectivas del precio del petróleo para la segunda mitad del año
Hay indicios de que los grandes productores pertenecientes al cártel podrían optar por revisar sus políticas para contener la producción de cara a esas sanciones que Estados Unidos planea imponer a Irán y que limitarían su producción. También hay indicios de que Rusia podría desligarse del pacto con la OPEP para reducir la producción.
"Se espera que los fundamentales del petróleo se debiliten en 2019 debido a un suministro 'no-OPEP' más fuerte de lo esperado, pero también a la posible liberación de barriles de la OPEP, ya que es poco probable que el acuerdo conjunto entre la OPEP y los países no miembros de la OPEP se mantenga en vigor", dijo JP Morgan.
El banco añadió que prevé "que la oferta fuera de la OPEP aumente bruscamente en 2019, liderada por el crecimiento del esquisto estadounidense, junto con Rusia, Brasil, Canadá y Kazajstán". JP Morgan es bajista con respecto a las perspectivas del precio del petróleo para la segunda mitad del año.
Mientras tanto, la agencia de noticias rusa Interfax informó el sábado de que la producción de petróleo de Rusia, la más grande del mundo, había aumentado a 11,1 millones de barriles por día a principios de junio, muy por encima de su objetivo de producción de menos de 11 millones de barriles al día como parte del acuerdo con la OPEP.
La OPEP, junto con algunos productores no pertenecientes a la OPEP, incluida Rusia, comenzó a contener la producción en 2017 para poner fin a un exceso de oferta mundial y apuntalar los precios.
La OPEP y sus socios se reunirán el 22 de junio en la sede del cártel en Viena, Austria, para discutir sobre su política de producción.