• Volverán a solicitarlo ante el silencio de los magistrados que investigan el caso
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Ante el silencio de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), tras la admisión a trámite de las siete querellas y 25 denuncias contra el president de la Generalitat, Artur Mas, por la celebración del 9-N, la acusación popular del sindicato Manos Limpias volverá a reclamar que acuda a declarar en calidad de imputado.

El jefe del Govern catalán está siendo investigado por el tribunal, que acordó por unanimidad pedir más información sobre su implicación, la de la vicepresidenta del Govern, Joana Ortega, y de la consellera de Ensenyament, Irene Rigau, en la celebración del proceso participativo del 9 de noviembre sobre el futuro político de Cataluña.

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La decisión se tomó el pasado 22 de diciembre porque se veían indicios de delito en la convocatoria de la votación alternativa a la consulta suspendida por el Tribunal Constitucional (TC). Sin embargo, ante la posibilidad de que la causa acabe archivada por los magistrados catalanes, Manos Limpias ejercerá mayor presión para que sean citados oficialmente como imputados y sean interrogados por el TSJC por un delito de desobediencia.

MAS NO IRÍA A JUICIO

Explica El Confidencial que los magistrados no ven suficientes indicios y el caso podría no acabar en juicio, sino que quede archivado ante las propias dudas que existen dentro de la judicatura de si el comportamiento de Mas cumple los requisitos para la comisión de un delito de desobediencia.

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