La presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Elvira Rodríguez, ha calificado las tarjetas opacas de Caja Madrid como un “problema fiscal”, concretamente de la propia caja o el Banco de España, pero en ningún caso de la CNMV.
Rodríguez ha recordado que Caja Madrid era una entidad no cotizada, y ha insistido en que los ejecutivos de la caja no tenían obligación de comunicar sus sueldos al supervisor. “El procedimiento iba directamente contra la Hacienda Pública. Difícilmente podrían habernos dado eso”, ha señalado, en declaraciones recogidas por Europa Press.
Bajo su punto de vista, “es un problema fiscal y a lo mejor de quien fiscalizaba o del supervisor de esas entidades, que es el Banco de España”. Rodríguez ha hecho estas declaraciones antes de participar en en unas jornadas organizadas por APD y Deloitte este martes, al preguntarle si si el supervisor recibió datos erróneos de los sueldos de los ejecutivos de Caja Madrid y Bankia desde 2009 para evitar destapar el sobresueldo que suponían las tarjetas opacas.
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