La oleada de ventas desatada sobre el renminbi, que ha provocado que un dólar se compre por encima de 7 yuanes, sigue este martes, después de que el Banco Popular de China haya elevado el punto medio de su horquilla cambiaria hasta los 6,9683 yuanes. La caída de la moneda china del lunes desató una oleada de aversión al riesgo que tuvo efectos en los mercados financieros y dejó declives en las bolsas de todo el mundo.
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La principal causa de que Wall Street acabara con recortes del 3% y los parqués europeos lo hicieran con declives de entre el 1,5% y el 2% es el "efecto desestabilizador" del abandono de la política de sustentar al yuan por parte del supervisor monetario chino, explica Stephen Innes, analista de VM Markets. Hasta la fecha, el banco central había quemado sus reservas de divisas para mantener al renminbi por encima de la línea de las 7 unidades por cada billete verde, pero esta "ya no es su prioridad", añade. Es más, varios analistas señalan que este giro envía el mensaje de que han abandonado las esperanzas de que la guerra comercial llegue a su fin por lo que han decidido que el conflicto vaya de mal en peor.
Así las cosas, la divisa china ha seguido estirando sus mínimos de más de una década hasta los 7,0574 yuanes, mientras la media del anclaje de un 2% alrededor del que el Gobierno chino permite fluctuar al renminbi se halla en su punto más débil desde el 20 de mayo de 2008. Con todo, el consenso de 'Reuters' esperaba una rebaja hasta los 6,9736 yuanes.
Los analistas califican el movimiento del banco central chino de "considerable", ya que "se trata del doble del visto este lunes", indican los expertos de ING y eleva el riesgo de que la moneda se llegue a cambiar de manos en 7,1 yuanes/dólar.
Además, Gobierno de Estados Unidos ha anunciado este lunes su decisión de designar a China como un "manipulador de divisas", después de que el Banco Popular de China haya dejado caer el yuan a mínimos de 2008 con el dólar.
El hundimiento de la moneda china frente al dólar se ha producido apenas unos días después de que el inquilino de la Casa Blanca amenazase a Pekín con imponer aranceles adicionales del 10 por ciento a 300.000 millones de dólares (270.582 millones de euros) de productos chinos a partir del 1 de septiembre.
En respuesta, el Banco Popular de China (BPC) fijaba un punto medio en la horquilla de cambio del yuan en el mercado continental chino de 6,9225 yuanes por dólar, el canje más débil desde diciembre de 2018, tras lo que la cotización de la moneda china caía hasta los 7,0501 yuanes por dólar, un 2,2% por debajo del cruce registrado en la sesión anterior y el peor cambio de la moneda china desde mayo de 2008.
En este sentido, el banco del gigante asiático destacó el lunes que el desplome del cambio del yuan o renminbi responde "al unilateralismo y las medidas de proteccionismo comercial, así como a la imposición de incrementos arancelarios", aunque ha señalado que "el renminbi continúa estable y fuerte frente a una canasta de monedas".
"Este es el mercado. Oferta y demanda y el reflejo de las fluctuaciones en el mercado internacional de divisas", ha defendido el instituto emisor chino, añadiendo que las fluctuaciones del tipo de cambio también son normales y pueden contribuir a que el mecanismo de precios desempeñe el papel de asignación de recursos y ajuste automático. "Es normal que suba y baje (el tipo de cambio)", apuntó.