La atención de los inversores vuelve este martes a la libra, que sigue moviéndose de la mano del Brexit. El Tribunal Supremo de Reino Unido ha dictaminado que la suspensión del Parlamento británico forzada por el primer ministro, Boris Johnson, es ilegal ya que "evita que el Parlamento desempeñe sus funciones constitucionales". "La decisión marcará el curso de las negociaciones, a poco más de un mes para el fin de la prórroga dada hasta el 31 de octubre por Bruselas a Londres", indica Naeem Aslam, analista de Think Markets.
Noticia relacionada
"La resolución da una gran ventaja a la oposición", explica el experto, ya que "les permite dinamitar el Brexit caótico del premier" y la Cámara de los Comunes podrá volver a reanudar su actividad, sin tener que esperar al discurso de la Reina del 14 de octubre, con lo que los laboristas tendrán más tiempo de maniobrar en contra de los planes del primer ministro. De hecho, el portavoz de la Cámara Baja, John Bercow, ya ha pedido que la actividad parlamentaria vuelva a la normalidad.
"Desde una perspectiva de mercados, este evento elevará la votalidad de la libra, cuando esta se cambia de manos por debajo de las medias móviles de 100 y 200 días contra el dólar, lo que demuestra que los bajistas tienen el control del cruce", señala Aslam. La moneda se ha encaramado hasta casi los 1,25 dólares tras conocerse la noticia y el experto espera que "la tendencia alcista siga desde aquí".
Este martes, antes de conocerse la decisión judicial, la moneda ha regresado a las inmediaciones de los 1,24 dólares, después de marcar un máximo de casi tres meses, el viernes, cerca de los 1,26 dólares.
Contra el euro, la moneda británica se cambia en 0,8844/34 libras, menos presionada que en el cable (libra/dólar). Esto se debe a que la moneda europea se mantiene deprimida por los débiles datos macroeconómicos, que incrementan los miedos de recesión el Alemania y de frenazo del crecimiento económico en la eurozona. El euro remonta este martes frente al dólar desde los mínimos de dos semanas del lunes, en los 1,0960 dólares, pero los inversores mantienen su pesimismo.
