El mercado de las divisas ha decidido dejar de lado las tremendas sacudidas del Brexit sobre la libra para centrarse en el dólar de EEUU tras el aviso de la Reserva Federal (Fed). El 'billete verde' ha cedido terreno y apunta a que perderá sus cotas a largo plazo, después de que el banco central haya anunciado que revisará su política monetaria de cara a 2019.
Los analistas especulan este lunes con que una pausa en los incrementos de tipos después de acelerar las subidas hasta cuatro veces este 2018 -si se cumple la de diciembre- mantiene a los operadores en guardia. Avisa Stephen Innes, analista de Oanda, deque puede ser "el típico canario en la mina y puede desembocar en una corrección en la Bolsa estadounidense si la economía de EEUU muestra signos de erosión".
El dólar ha disfrutado de una buena racha este año gracias a la política constante de la Reserva Federal en una economía sólida y al aumento de las presiones salariales. Se espera un cuarto aumento de tasas para este año el próximo mes y los responsables de la formulación de políticas habían indicado dos más para junio de 2019.
Pero los comentarios del viernes de Richard Clarida, el nuevo vicepresidente de la Fed, pusieron a prueba las expectativas del mercado ante un ritmo constante de ajuste de las condiciones monetarias. Clarida advirtió sobre una desaceleración en el crecimiento global, y señaló que "va a ser relevante" para las perspectivas de la economía de los Estados Unidos.
El dólar ha cedido terreno, en consecuencia y se cambia de manos en 1,1400/20 dólares contra el euro, mínimos de 11 días. La libra ha intentado remontar, aprovechando la debilidad del dólar, pero sube tímidamente y se queda por debajo de los 1,29 dólares. En cuanto al euro/libra, ha subido un 2,7% desde el 13 de noviembre, muy condicionado por las incertidumbres que pesan sobre el Brexit y que siguen dominando los mercados en unas semanas que han sido calificadas por la primera ministro, Theresa May, de "muy intensas" en cuanto a negociaciones.
La premier tiene la árdua tarea por delante de lograr el apoyo de los parlamentarios a su principio de acuerdo con Bruselas, a la vez que deberá lidiar con una más que segura moción de censura en las próximas semanas o jornadas. Los analistas coinciden en señalar que la volatilidad en la libra sera absoluta hasta la votación en la Cámara de los Comunes que se prevé el 10 de diciembre.