El euro deja alzas moderadas, por encima de 1,21 dólares tras conocerse la decisión de política monetaria adoptada en la última reunión del Banco Central Europeo (BCE) de 2020. La moneda común celebra que el banco central no se ha movido del guión que esperaba el mercado que cumpliera y la ampliación del programa de compras contra la pademia (PEPP) se ha mantenido en la media de lo que preveía el consenso, en 500.000 dólares. La dotación total es de 1,85 billones en compras hasta marzo de 2022.
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Los funcionarios del BCE habían dejado claro en las últimas semanas que un mayor Programa de Compras de Emergencia para Pandemias (PEPP) y más préstamos subvencionados a largo plazo para los bancos formarán la columna vertebral de las medidas políticas.
"El BCE no ha disparado ningún bazuca este mes", indica Naeem Aslam, analista de Axi trade. "Esto ha hecho que los inversores se pongan largos en el euro ya que las expectativas eran que el BCE se mostraría más preocupado por la recuperación económica", argumenta. "Claramente, la decisión muestra que el BCE confía en las medidas actuales que son masivamente positivas para los mercados", redondea el experto.
"Es poco probable que estos ajustes tengan un efecto significativo en el euro", indica por su parte el analista de Commerzbank You-Na Park-Heger.
Otra posible sorpresa sería que la presidenta del BCE, Christine Lagarde, adoptara una postura igualmente inesperada contra la reciente subida del euro, argumentaba Park Heger, añadiendo que, en su opinión, "es poco probable que veamos más que un tigre sin dientes". De hecho, Lagarde se ha limitado a señalar, preguntada por el tipo de cambio del euro, que "seguiremos monitorizando la apreciación del euro con mucha atención". "El tipo de cambio no es nuestro objetivo", ha recordado.
