- La mayoría de analistas espera que la libra reanude sus pérdidas en 2017
- Los largos en los cruces del yen, entre las apuestas de los expertos
Volatilidad e infartos. Estas dos palabras podrían definir bien la operativa en el mercado de las divisas en 2016, doce meses en los que las monedas han fluctuado marcadas por los acontecimientos del plano político y las divergencias de los bancos centrales. Factores que han eclipsado completamente los datos macroeconómicos, que tradicionalmente ofrecen más tranquilidad a los inversores, pero que han sido de todo menos excitantes.
En cambio, 2016 ha estado sembrado de momentos de carreras en el euro y el dólar, que han operado muchas veces a golpe de rumor, para corregir inmediatamente después; de desplomes imposibles, como el flash-crash de la libra del 7 de octubre; y de acontecimientos sorpresa, como el Brexit o la victoria de Donald Trump en EEUU, cuyas repercusiones se dejarán sentir en 2017.
366 días que han puesto a prueba los nervios de los inversores y sus planes de operativa en un mercado que ha estado plagado de minas y que amenaza con seguir igual de agitado de cara a enero. Para ayudar a aquellos que quieran aprovechar la navidad para reorganizar sus posiciones, 10 analistas ofrecen ideas y estrategias para empezar con buen pie el próximo año.
2017 arrancará con el mismo tono con que acaba 2016, con un “panorama político que sigue siendo el principal factor desconocido”, asegura Giancarlo Prisco, analista de bolsa.com. “El problema no resuelto del Brexit y las elecciones en algunos países clave de Europa (Francia, Alemania y Países Bajos) denotan que el centro de atención de nuevo se fijará firmemente en el futuro de la Unión Europea (UE), en el nacionalismo y en el proteccionismo”, señala Prisco.
PARIDAD EURO/DÓLAR
Si a la ecuación se le añaden las ya nombradas divergencias entre políticas monetarias de la Reserva Federal de EEUU (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE), casi todos los analistas consultados apuestan porque el tan vaticinado empate entre el euro y el dólar se producirá en 2017. La única que se desmarca de esta previsión es la experta en divisas de Rabobank, Jane Foley, que espera que hacia finales de 2016 la moneda única se haya recuperado contra su rival de EEUU hasta los 1,10 dólares, debido a las perspectivas de que “el rendimiento de los bonos de EEUU se suavice en los próximos meses”. Sin embargo, es prudente al afirmar que “cada vez está más claro que los inversores se están posicionando para mayores sacudidas en el plano de la política de la zona euro”.
La ruptura del rango de consolidación de los últimos dieciocho meses entre los 1,05 y los 1,15 dólares, “podría impulsar al euro/dólar hasta un objetivo técnico en torno a los 0,9500 dólares
Pero ya en 2017, José Lagarto, analista de Orey Financial, cree que "la ruptura del soporte dado por el mínimo de 2015 en 1,0461 dólares puede tener una primera aproximación para probar el soporte psicológico, que es la paridad, un nivel no visto desde diciembre de 2002”. La ruptura del rango de consolidación de los últimos dieciocho meses entre los 1,05 y los 1,15 dólares, “podría impulsar al euro/dólar hasta un objetivo técnico en torno a los 0,9500 dólares, mínimos de junio de 2002”, argumenta Lagarto. Para Marc Ribes, fundador de Blackbird, “las posiciones cortas en el euro/dólar son una buena alternativa táctica”.
John Hardy, jefe de estrategia en divisas de Saxo Bank, cree, sin embargo, que a finales de 2017 las esperanzas para la economía estadounidense son demasiado optimistas y el euro comenzará a recuperarse desde niveles por debajo de la paridad”. Además, “una ralentización de las compras de activos del BCE a partir del segundo trimestre, junto con la sensación de que la UE esté solucionando sus problemas en algún momento de la segunda mitad del año, podría dar lugar a un rebote del euro en términos generales”, avanza Hardy.
IDEAS PARA EL EURO Y LA LIBRA
Pero el estratega de Saxo Bank insiste en la debilidad de esta moneda en los próximos meses y destaca que la divisa europea presenta otras oportunidades en sus cruces contra el franco suizo, el rublo y la libra. El nivel clave del euro/franco suizo lo fija en los 1,10 francos y, aunque indica que “no esperamos ningún drama importante” en este cruce, sí apuesta por intervenciones del Banco Nacional de Suiza que sujeten la apreciación de su divisa en la búsqueda de refugio. Aun así, el euro puede depreciarse hasta los 1,05 francos o incluso por debajo.
En cambio, para Hardy el euro será el ganador en el cruce euro/rublo, que apunta a la zona clave de los 75,00 rublos -actualmente, en cambio de un euro está entre los 68,00 y los 70,00 rublos- y expone que “el rublo está claramente sobrevalorado a medida que los vientos del 2016 se calman, negociándose mucho más fuerte de lo que debería, ya que los precios actuales del petróleo están lejos de lo que se necesita para estabilizar las finanzas de Rusia”. “Ante este escenario, el rublo podría comportarse de forma más débil aún que nuestras perspectivas”, pronostica.
La libra tiene un camino claro y es de debilidad generalizada en su tipo de cambio
A Andrés Jiménez, consejero delegado de EnBolsa.net, le “gusta mucho la situación en el euro/libra”, que desde el reciente soporte de las 0,85 libras “puede tratar de reestructurarse al alza hasta las 0,92 libras”, con lo que se posiciona “largo” o alcista en este cruce, apostando claramente por un fortalecimiento del euro contra la moneda británica y propone el nivel de las 0,90 libras para hacer un primer intento de aprovechar la tendencia. Hardy, por su parte, cree que mientras podría haber una cierta incertidumbre residual en la primera mitad de 2017, la libra debe recuperarse a medida que avance el año, porque “los riesgos del Bréxit están más que descontados”, con lo que fija su precio objetivo en las 0,78 libras por cada euro.
Pero el analista de Saxo Bank va contra la tendencia que exponen gran parte de los expertos consultados. Francisco Arco, analista de XTB, insiste en que la divisa británica “tiene un camino claro y es debilidad generalizada en su cotización”. “Lo especial de su situación también le imprime una naturaleza volátil y difícil de enfrentar a pares más estables, acertando en el movimiento direccional”, explica el experto. Giancarlo Prisco alerta, no obstante, que actualmente la libra está en fase de retroceso contra el dólar hasta los 1,2830 dólares, donde descansa una importante resistencia, y Andrés Giménez apunta precisamente a este nivel para “intentar posiciones cortas con stop loss por encima de los 1,3200 dólares”.
José Lagarto opina que con la posibilidad de que el Brexit se materialice a partir del próximo mes de marzo, “después de la fuerte devaluación en el referéndum, la libra tiene que consolidar de alguna manera las pérdidas de este año”. “Con las posibles valoraciones del dólar, el par que mejor podría expresar esta pérdida puede ser el de libra/dólar, que actualmente negocia en torno a 1,2400 dólares, pero el precio volverá a operar durante el 2017 alrededor de 1,1500 dólares”, indica el analista de Orey Financial.
DÓLAR CONTRA EMERGENTES Y DIVISAS 'COMMODITIES'
Pero el gran tema que destacan todos los expertos consultados es la fortaleza del dólar en todos sus frentes. Para Gonzalo Cañete, estratega de mercados de Swissquote, “volvemos a tiempos de proteccionismo y el dólar será una divisa de ataque”. La clave, en la Fed, que podría verse obligada a aumentar de forma más agresiva los tipos durante el próximo año “para contener las presiones inflacionarias causadas por el crecimiento de Estados Unidos, que puede ser impulsado por medidas propuestas por Donald Trump”, explica José Lagarto. “Por lo tanto, el aumento de la tasa de interés esperada podría ser el gran impulsor del dólar el próximo año”, expone este experto.
En este contexto, Francisco Arco rescata la idea de enfrentar al dólar en pares relacionados con los países emergentes de Latinoamérica, “con idea de compra de dólares y ventas de emergentes”. “La apreciación de la cotización del dólar genera un encarecimiento de deuda generalizada para los países como México y Brasil y, en consecuencia, se produce una devaluación de su divisa”, argumenta el analista de XTB.
Sara Carbonell, analista de CMC Markets, extiende este panorama al resto de emergentes. Destaca la experta el rand sudafricano, que aunque en 2016 recuperó parte de toda la caída de largo plazo iniciada en 2011, "una subida de tipos por parte de la Fed puede hacer apreciarse al par dólar/rand sudafricano". Esa corrección que ha tenido lugar en 2016 es de un 38,2% de Fibonacci. "En mi opinión solo se confirmaría si cierra por debajo de los 13,36 en velas mensuales", señala la expeta.
En cuanto a divisas relacionadas con las materias primas, como el peso chileno, el dólar canadiense o el ya mencionado rand sudafricano, muestran debilidad al igual que el propio índice CCI de materias primas. Arco propone la estrategia de “enfrentar dichas divisas al dólar”, que “es caballo ganador, con el escenario actual de mercado”, afirma. El experto de XTB también expresa que le llama la atención el dólar/corona noruega, donde se podrían buscar “posiciones largas” si se da la combinatoria entre una prolongación de precios bajos en el petróleo y un dólar fuerte.
Una divergencia se aproxima en los mercados mundiales: dn dólar fuerte con un petróleo subiendo
Gonzalo Cañete propone “rizar aún más el rizo” y elige el crudo. “Prevemos un fortalecimiento significativo hacia los 60 dólares el barril, salvo que en esta ocasión no creemos que sea motivado por una debilidad del dólar, sino más bien por un aumento las tensiones geopolíticas en Oriente Medio”, señala.
De modo que "una divergencia se aproxima en los mercados mundiales", expone el estratega de Swissquote: “Un dólar fuerte con un petróleo subiendo”. Propone seguir de cerca el oro y el índice dólar DXY -que mide el desempeño de la divisa de EEUU contra una cesta de seis rivales- para no dejarse eclipsar por el espejismo del petróleo. También se decanta por las divisas correlacionadas con las materias primas que “sin duda alguna tendrán un momento dorado si el crudo despega”, y llama a observar “las estructuras bajistas del dólar, debilitándose contra la corona noruega, el dólar canadiense o el rublo”.
APROVECHANDO LA DEBILIDAD DEL YEN
Francisco Arco cree que en los cruces que impliquen a la moneda nipona, la idea es que se va a dar una “venta generalizada de yenes, mientras no exista inestabilidad en los mercados”, con lo que una buena idea es “enfrentar esta divisa con monedas estables por el seguimiento de sus bancos centrales, como es el caso del franco Suizo, o con divisas que están recogiendo compras o que exhiban fortaleza, como el dólar estadounidense”, opina el analista de XTB. Para José Lagarto, el yen/dólar podría buscar en 2017 los máximos históricos en los 125,00 dólares, presa de la fuerte tendencia alcista que le ha llevado desde los 100 yenes hasta los 114 yenes por cada dólar actuales, comenta el experto de Orey Financial.
Marc Ribes indica que la divisa de Japón ha comenzado un proceso correctivo, para ajustar más su cotización a la realidad de su economía. Mostrarse alcista en el dólar/yen o la libra/yen “tiene sentido estratégico, por lo que buscaríamos largos en los ajustes que veamos que se producen en estos cruces en las próximas semanas”, explica el fundador de Blackbird. Bill Hubard, analista de learntotrade, suma a la lista de las posiciones “largas o alcistas” en el franco suizo/yen, ya que “los diferenciales en el rendimiento de los bonos debilitarán a la moneda nipona y el franco suizo ofrece buena cobertura en los riesgos políticos de la zona euro”.
Andrés Jiménez comenta que vigilará muy de cerca el dólar/yen, dólar canadiense/yen, dólar neozelandés/yen, franco suizo/yen, que están llegando a importantes resistencias en gráficos semanales. En especial, cree el CEO de EnBolsa.net, que si se llegara a revalorizar el yen, "el franco suizo puede perder por lo menos un 7% u 8% de todo su movimento al alza reciente".
EL DÓLAR AUSTRALIANO Y EL YUAN
Para aquellos operadores que busquen diversificar, Lagarto propone retirar al dólar de EEUU de la ecuación y expone que el cruce entre el dólar australiano/dólar canadiense presenta excelentes oportunidades en 2017. “Actualmente, el par negocia en torno a la paridad y durante 2017 puede volver a un mínimo de 2015 alrededor de los 0,9000 dólares canadienses. La ruptura de este nivel podría llevar al cruce a niveles mínimos de 2010 en el nivel de los 0,8600 dólares canadienses”, explica. Hubard coincide con esta visión y propone “cortos o bajistas” en el dólar australiano/dólar canadiense, ya que “refleja las divergencias de crecimiento entre China y EEUU”.
Tomando China como referencia, en el cruce dólar/yuan, el experto cree que hay que abrir “largos”, ya que el gigante asiático se debilitará a causa de las fugas de capitales en China y de las divergencias en materia de política monetaria entre el Banco Popular de China y la Fed. Expertos de Danske Bank y de Deutsche Bank también se han mostrado bajistas en la divisa del gigante asiático y prevén que un dólar alcanzará el cambio de 7,30 yuanes a finales de 2017. Como último consejo, el analista de learntotrade propone “largos o alcistas en el dólar/won coreano”, ya que “las diferencias en el crecimiento del país y la política monetaria también incrementarán las salidas de fondos de Corea”.