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El euro y la libra estiran su recuperación frente a un dólar en retirada, de la mano del retroceso en el rendimiento de los bonos de EEUU. El índice del dólar ha caído por debajo de 111,50, mientras se aleja de los máximos de la semana pasada en 114,78. La libra ha logrado remontar hasta 1,14 dólares, en la que podría ser su sexta jornada consecutiva de subidas desde los mínimos históricos en 1,0350 dólares. La recuperación ha sido del 10% para la moneda de Reino Unido. El euro logra rebasar y consolidar los 0,98 dólares, pero se mantiene lejos de la paridad.
La decisión del gobierno de Reino Unido de cancelar el plan de recorte de impuestos que había propuesto la semana pasada vistió de optimismo a los mercados. Sin embargo, "esto no obedece a que las cosas van mejor, ni mucho menos; pero sí parece haber vencido la idea de que una medida de este tipo sin financiamiento claro hubiera generado un aumento de la deuda pública que habría impactado de nuevo en la economía británica, muy maltrecha en estos días", indica Adrián Aquaron fundador de Trader College. "La libra tiene muchos escollos por delante antes de cambiar su sesgo bajista actual, pero es notable su mejoría, tal como se ve en el cruce euro/libra, con una fuerte impronta bajista", explica.
El impulso de la moneda británica coincide con un retroceso del dólar marcado por una fuerte corrección a la baja de los rendimientos de los Estados Unidos. El rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años cayó a un mínimo intradiario del 3,57%, ya que se situó por debajo del máximo anual de la semana pasada, en el 4,02%.
"El retroceso de los rendimientos estadounidenses y del dólar parece reflejar en parte que los participantes en el mercado se han sentido más cómodos con la idea de que la Fed se acerca al final de su ciclo de subidas de tipos", comentan los expertos de MUFG. El mercado de tipos de interés de EEUU espera que la Fed reduzca el ritmo de las subidas de las tasas, ya que los tipos de interés se mueven más hacia un territorio restrictivo y se espera que la inflación disminuya aún más de cara al próximo año, después de haber alcanzado un máximo del 9,1% en junio.
Estas expectativas se han visto alimentadas en las últimas horas tras el aviso de la ONU a la Fed sobre los incrementos de tasas. En concreto, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) ha publicado este lunes un informe en el que advierte que la política monetaria y fiscal de los bancos centrales está poniendo en peligro la economía mundial. Afirma que, en particular, las subidas de los tipos de interés en Estados Unidos reducirán los ingresos futuros de los países en desarrollo en 360.000 millones de dólares.
La moneda que no ha aprovechado el momentum es el yen, ya que se mantiene peligrosamente cerca de 145,00 yenes, nivel que presumiblemente podría disparar una intervención del Banco de Japón.
Sin embargo, desde MUFG avisan de que estas caídas no son más que una pausa en la fortaleza de la moneda de EEUU. "Los últimos acontecimientos han quitado el viento de las velas del dólar más fuerte, pero no estamos convencidos de que sea el comienzo de una reversión más sostenida a la baja", afirman.