El euro se mantiene presionado este miércoles, a pesar de la mejora de los datos macro publicados el martes. La retórica ultraflexible del vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, más la oleada de aversión al riesgo en los activos españoles que ha suscitado el acuerdo de Gobierno en España entre el PSOE y Podemos, alimentan la cautela entre los operadores de la eurozona y la moneda no logra desmarcarse de 1,10 dólares, niveles no vistos desde mediados de octubre.
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El panorama es aún más sombrío ya que se produce en medio de una tendencia bajista del dólar frente a otros pares. El billete verde se ha visto afectado por las recientes noticias sobre la guerra comercial. El presidente de los EEUU, Donald Trump, se limitó a decir, durante su conferencia en el Club Económico de Nueva York, que el acuerdo con China "está cerca", pero no dio detalles. El dólar reaccionó con caídas marginales y cede algo de terreno frente al yen, aunque peor parado ha salido el yuan, que ha caído a mínimos de 10 días, por encima de los 7,01 yuanes.
Sin embargo, el euro fue la moneda que mostró un peor comportamiento el martes. Los datos del índice Zew, que mostraron un avance de la confianza en Alemania y en la eurozona, poco hicieron por apuntalar una moneda que se vio lastrada por "la retórica acomodaticia del BCE", indican los expertos de Sucden Financial. En una entrevista en el diario económico alemán 'Börsen-Zeitung', Guindos abrió la puerta a seguir bajando los tipos de interés "si es necesario", a pesar de que reconoció que un entorno de tipos bajos tiene "efectos colaterales" en la estabilidad financiera.
Además, las preocupaciones sobre España han agregado más problemas a la moneda, ya que a los mercados les ha sentado muy mal la coalición de izquierdas en el Gobierno. Lejos de acabar con la incertidumbre política, ya que está por ver si el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, logran los apoyos parlamentarios para la investidura del socialista, alimenta aún más el desasosiego sobre la marcha del país. Esto se refleja, además de en el euro, en el bono a 10 años, que se ha disparado a máximos de julio y en la prima de riesgo que está en máximos de un mes.
Este miércoles, los analistas también señalan que el euro estará muy pendiente de la decisión de Trump sobre la imposición de aranceles a los automóviles europeos. Las últimas declaraciones del Secretario de Comercio de los Estados Unidos, Wilbur Ross, y del Presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, apuntaron a que EEUU pospondrá su decisión hasta el próximo año, después de "positivas conversaciones" con los fabricantes de vehículos sobre posibles reubicaciones de la producción. "Si se implementaran los aranceles, sería otro golpe para el ya frágil sector manufacturero europeo", comentan los analistas de Danske Bank.
