El dólar se resiente por la investigación de los e-mails de Hillary Clinton

En la sesión del 28 de octubre, la moneda de EEUU aún reforzó más su escalada contra sus principales rivales después de que el dato del producto interior bruto (PIB) de EEUU mostrara que la economía del país se expande a un mayor ritmo de lo esperado. El crecimiento del país alcanzó el 2,9% en el tercer trimestre de 2016, el mejor dato de los dos últimos años, un resultado que alimentó el optimismo del mercado hacia una subida de tipos por parte de la Reserva Federal de EEUU (Fed) en diciembre.

Sin embargo, las informaciones sobre que el FBI vuelve sobre el caso del uso que hizo Clinton de un servidor privado para enviar e-mails entre 2009 y 2013, han ensombrecido el buen panorama para la divisa norteamericana, que opera por debajo de los 105 yenes, después de alcanzar máximos en los 10,525 yenes el pasado viernes, y ha permitido al euro recuperar los 1,0950 dólares. “No creemos que esta investigación vaya a tener un gran impacto en las elecciones a tan solo una semana de la cita con las urnas, pero los titulares que lleguen desde el frente político pueden añadir volatilidad a la operativa con divisas”, señala Kathy Lien, analista de BK Asset Management.

Los titulares que lleguen desde el frente político en EEUU pueden añadir volatilidad a la operativa con divisas

Dejando a un lado estas noticias, a las que se aferran los partidarios del candidato republicano, Donald Trump, para ganarle algo de terreno en las encuestas a su rival demócrata, el dólar cerrará un mes de ganancias contra todos sus pares y con el índice del dólar -que se usa para medir la fortaleza de esta divisa contra una cesta de monedas- un 3% arriba desde inicios de octubre. “Los futuros de la Fed ya descuentan casi un 75% de posibilidades de que la Fed suba tipos en diciembre y los datos macroeconómicos refuerzan este sentimiento. Política monetaria y crecimiento son lo que marca el camino para el dólar”, explica Lien.

EURO Y LIBRA

Las apuestas de los especuladores recogidas en el informe semanal de la Commodity Futures Trading Commission (COT por sus siglas en inglés), muestran como las apuestas largoplacistas a favor del dólar subieron por quinta semana consecutiva y alcanzaron sus máximos desde el mes de enero. Sin embargo, expertos de ING alertan, en declaraciones a Reuters, que el mercado se ha mantenido con un sesgo alcista hacia el dólar durante las últimas 23 semanas, con lo que podríamos ver un retroceso, especialmente contra el euro y la libra si llegan buenas noticias desde Reino Unido y la zona euro.

En la agenda macroeconómica espera la publicación de los datos de los índices de gestores de compras del Reino Unido y el informe trimestral de inflación. Además, el Banco de Inglaterra celebrará su reunión de política monetaria el día 3 de noviembre. El mercado no espera cambios, después de que el gobernador del banco central, Mark Carney, ofreciera muestras de que descarta esta opción por el momento y aún así la libra sigue bajo una fuerte presión vendedora. Analistas de Danske Bank alertan que Carney mantendrá un tono moderado, a pesar de que el BoE revise al alza sus perspectivas de crecimiento. En cuanto a la operativa de la libra, Michael Hewson, analista de CMC Markets apunta que la divisa ha encontrado soporte entre los 1,2080 y los 1,2100 dólares. “No obstante, necesitamos ver que se supera la resistencia en los 1,2270 dólares para estabilizar el cable (como se conoce al cruce Libra/Dólar) y esperar nuevas subidas hacia los 1,2330 dólares”, indica el experto.

El euro tiene buenas perspectivas de continuar con su subida hacia los 1,1100 dólares, después de que rompiera al alza la resistencia en los 1,0950 dólares, explica Hewson. Sin embargo, pocas noticias se esperan desde la zona euro en esta semana, con lo que la operativa de la moneda única contra el billete verde estará completamente determinada por “el apetito del mercado hacia el dólar”, concluye Kathy Lien.