El dólar y el yen han puesto en marcha su papel como activo refugio tras los nuevos miedos desatados entre los inversores sobre la ralentización mundial, después de una batería de datos macroeconómicos más suaves en China y Europa publicados el pasado viernes. El índice que mide el desempeño del billete verde se ha disparado a máximos de 19 meses, mientras la libra y el euro sufren una renovada presión.
Los expertos recuerdan que el apetito por el dólar incrementa en períodos de estrés en los mercados, pero dudan que el impulso de la moneda de EEUU se mantenga después de la última reunión del año de la Reserva Federal de EEUU (Fed). Los expertos comentan que el mercado ha más que descontado una nueva subida de tipos de 25 puntos básicos, por lo que la atención virará hacia los planes de política monetaria que anuncie el organismo de cara al próximo año.
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May alerta de que celebrar un nuevo referéndum sobre el Brexit "rompería la fe" de los británicosEl banco central ha elevado las tasas ocho veces desde diciembre de 2015 en un intento por restablecer la política a entornos más normales después de haber reducido los costes de los préstamos casi a cero para combatir la crisis financiera hace una década. Debido a que el mercado ha incluido en gran parte el alza de este mes, el dólar se dejará llevar por la orientación a futuro de la Reserva Federal.
De acuerdo con sus proyecciones en septiembre, el consenso en el banco central fue de tres alzas de tasas en 2019. Sin embargo, los futuros de tasas de interés utilizados para medir la probabilidad de nuevas alzas contemplan una sola alza en 2019.
"Es muy probable que cualquier contenido que haga referencia a la diferencia entre los precios de mercado de un aumento de la tasa de interés en 2019 en comparación con las previsiones anteriores de tres incrementos de la Reserva Federal tenga una fuerte repercusión en los mercados", según indica Michael McCarthy, estratega jefe de CMC Markets.
LA LIBRA Y EL EURO, A LA BAJA
Pero la debilidad de la libra y el euro limitará cualquier giro bajista en el dólar. La divisa británica sigue presa de la incertidumbre en torno al Brexit en otra semana que se augura agitada en Reino Unido. Por un lado, en el seno del partido conservador está creciendo la presión para que el Gobierno de la primera ministra, Theresa May, lance un segundo referéndum sobre el abandono de la Unión Europea. La premier descarta esta opción, pero se precipita hacia un callejón sin salida ya que tampoco hay posibilidades de que el acuerdo pactado con la UE supere la votación del Parlamento.
Pot otra parte, May explicará ante la Cámara de los Comunes este mismo lunes el fracaso de su intento de renegociación con los Veintisiete. Por otra parte, en Bruselas, la Comisión Europea publicará el viernes sus planes de contingencia ante un Brexit sin acuerdo, por lo que los analistas esperan que la libra se mantenga bajo presión, con posibilidades de volver a lo mínimos de la semana pasada en los 1,2470 dólares.
En cuanto al euro, la moneda comunitaria no es ajena a las tensiones de Brexit y se mantiene cerca de los 1,13 dólares, sujeta también al temor de los inversores de una ralentización económica tras los débiles datos macro de la Eurozona. La semana pasada cerró con caídas de un 0,6% ante el dólar, pero los inversores no esperan grandes movimientos antes de conocerse el veredicto de la Fed.