El dólar deja este viernes su mejor ganancia semanal en tres meses, impulsado por la creciente confianza en que la recuperación económica de Estados Unidos superará a la de sus pares mundiales.
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El índice del dólar ha alcanzado un nuevo máximo de dos meses, en medio de señales de resiliencia en el mercado laboral, pese a una cifra de nóminas no agrícolas algo por debajo del consenso de mercado, en 49.000 nuevos puestos de trabajo creados, frente a los 50.000 esperados. El índice del dólar subió ligeramente a 91,576 desde el jueves, tocando los 91,60 por primera vez desde el 1 de diciembre. El indicador ha subido todos los días de esta semana y se encamina a un avance semanal del 1,1%, el mayor desde el 1 de noviembre, tras la subida del 0,3% de la semana anterior.
El billete verde también renovó sus máximos frente al euro y el yen. En concreto, la moneda única batalla con los 1,20 dólares, lo que confirma la formación de una figura técnica de implicaciones bajistas que llevará al euro/dólar a los 1,18 dólares.
"La economía estadounidense es excepcionalmente fuerte en relación con otros países, lo que provoca la cobertura de posiciones cortas en el dólar", señala Tohru Sasaki, jefe de investigación del mercado de JP Morgan, apuntando a los indicadores de empleo y fabricación, así como el ritmo de las vacunas.
La actual racha de fortaleza del dólar podría prolongarse durante "varias semanas", agrega el experto, pero el panorama es más turbio a partir de entonces, ya que se prevé que Europa y Asia se pongan al día con las inmunizaciones y la política monetaria ultrablanda de la Reserva Federal sigue limitando la subida de los rendimientos estadounidenses a largo plazo. El billete verde se ha visto apoyado por la subida de los rendimientos del Tesoro, que se produjo cuando los operadores se posicionaron a favor de un gasto fiscal masivo.
Los demócratas del Senado de EE.UU. se preparaban para una sesión de votación maratoniana destinada a superar la oposición republicana a la propuesta de estímulos del presidente Joe Biden de 1,9 billones de dólares COVID-19.
Los analistas y los inversores están sopesando si la fortaleza del dólar este año es un ajuste temporal de la posición tras una caída del 7% del índice del dólar en 2020, o un cambio más duradero del pesimismo sobre el dólar.
Hay potencialmente una gran cantidad de cortos en dólares para cubrir, particularmente contra el yen, donde los fondos de cobertura habían acumulado sus mayores apuestas bajistas desde 2016.
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