Signo mixto para las acciones asiáticas en las operaciones del martes, mientras los inversores reaccionan a la reunión virtual entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de China, Xi Jinping.
El índice Hang Seng de Hong Kong ha avanzado un 1,16%. Las acciones de la empresa de hardware para juegos Razer en Hong Kong han subido un 15,42% después de que Reuters informara, citando fuentes, que los ejecutivos de la empresa están liderando un plan de consorcio para valorar la compañía en hasta 35.000 millones de dólares de Hong Kong (unos 4.490 millones de dólares).
Las acciones de China continental han dejado declives, con el compuesto de Shanghai cayendo un 0,37%, mientras que el componente de Shenzhen ha bajado un 0,187%.
Las acciones japonesas han cerrado al alza, con el Nikkei 225 un 0,11% arriba hasta 29.808,12, mientras que el índice Topix subió un 0,11% hasta 2.050,83. En Corea del Sur, el Kospi bajó ligeramente.
El índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón cotizó un 0,28% al alza.
La reunión virtual entre Biden y Xi, que marcó la comunicación más estrecha entre los dos líderes desde que Biden asumió el cargo en enero, comenzó con una nota positiva con comentarios cordiales. Tras la reunión, las declaraciones públicas hicieron hincapié en las formas de evitar el conflicto entre las dos potencias económicas, aunque se observaron puntos de tensión.
El S&P/ASX 200 de Australia cayó un 0,67% y cerró en 7.420,40 después de que el gobernador del Banco de la Reserva de Australia se opusiera a las peticiones de una subida de tipos el año que viene.
"Los últimos datos y previsiones no justifican un aumento del tipo de interés en 2022", dijo el gobernador del RBA, Philip Lowe, en respuesta a las expectativas de que la mayoría de los bancos centrales de las economías avanzadas subirán los tipos de interés a finales de 2022. Los inversores han estado atentos a las pistas sobre cuándo los principales bancos centrales podrían subir los tipos de interés oficiales en medio de la preocupación por la inflación.
Las actas de la reunión de política monetaria del banco central australiano de noviembre, publicadas el martes, mostraron que el RBA espera mantener el tipo de interés hasta 2024.
